Tipificación, la meta para una producción homogénea
La apertura del mercado de Estados Unidos interpela a toda la cadena a resolver sus problemas estructurales. En el Block Test de novillos de Jesús María se expuso el potencial de nuestra ganadería.
24/10/2025 | 17:31Redacción Cadena 3
FOTO: Cucarda bajo cero. Una muestra del potencial de la cadena ganadera argentina.
Un block test es una evaluación comparativa de desempeño que se realiza con animales jóvenes (novillos o vaquillonas) de distintos orígenes genéticos, criaderos o cabañas, con el objetivo de medir y comparar su comportamiento productivo en condiciones controladas.
Habitualmente reúne un grupo de novillos (generalmente de distintas razas o líneas genéticas) que se someten al mismo manejo, alimentación y ambiente durante un período determinado (por ejemplo, 120 o 150 días).
Durante ese tiempo se registran variables como ganancia diaria de peso; conversión alimenticia (cantidad de alimento necesaria para ganar un kilo de peso); eficiencia de terminación o engrasamiento; rendimiento y calidad de carcasa (en algunos casos se realiza faena y evaluación carnicera).
Se trata, en definitiva, de una herramienta técnica y comparativa que mide la performance real de los animales, separando el efecto del ambiente del potencial genético, y es muy utilizada en programas de mejoramiento genético y evaluación de razas bovinas.
La apuesta de Jesús María
El block test realizado días atrás en Jesús María se llevó a cabo con la participación del doctor Horacio Ávila y Gessy Druillet, junto con otros expertos en el sector. En diálogo con El Campo Hoy, la especialista uruguaya explicó que este proceso incluye una jura en pie y una evaluación de carcasa, que abarca aspectos como la conformación, el marmoreo, el área de ojo de bife y otros atributos que determinan la calidad de la carne. "Fue súper completo en este caso el block test", afirmó.
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Los resultados de la evaluación mostraron animales "súper parejos" y una diversidad de razas que contribuyeron a una buena calidad de hacienda. Se destacó la importancia del marmoreo como un atributo esencial en la demanda actual de carne.
"La evaluación objetiva de las características de área de ojo de bife y de marmoreo es fundamental", señaló Druillet.
Además, se resaltó la necesidad de que los productores se sumen a estos block tests, ya que ofrecen una evaluación didáctica que permite visualizar el desarrollo del trabajo en el campo y en el corral. "Estos block tests tienen una evaluación sumamente didáctica para el productor", enfatizó.
Falta de unificación
En cuanto a la tipificación de la carne en Argentina, se mencionó la falta de unificación de criterios entre las plantas frigoríficas. "Las herramientas objetivas ayudan a homogenizar productos y a que el criterio sea el mismo en todas las plantas", comentó. Esto, facilitaría la estandarización y daría confianza al consumidor final sobre la calidad del producto exportado.
El escenario global actual presenta nuevas oportunidades para la carne argentina, especialmente con la apertura de mercados en Estados Unidos. Sin embargo, se reconocieron problemas internos en la cadena de producción que deben ser resueltos.
"Las oportunidades están dadas", afirmó la experta tras su reciente participación en la feria ANUGA, donde se evidenció la creciente demanda de carne de calidad.
El desafío radica en mejorar la homogeneización de productos y la selección genética. "Utilicemos toros medidos que tengan evaluaciones genéticas", recomendó sugiriendo que esto podría mejorar la calidad de la carne. Con una hacienda mayormente británica, Argentina tiene el potencial para posicionarse en mercados de alta demanda en Europa y Asia.
La conclusión es clara: hay un camino a seguir para aprovechar las oportunidades en el mercado de carne de calidad, tanto para Argentina como para la región en general. "Está el platos servidos. Hay que aprovechar la oportunidad", concluyó Druillet.
