Un mercado para probar sabores serranos y llevarlos a casa

Por Carola Cinto
Fotos Carola Cinto

Traspasar la cortina del Mercado de Pilar Benzi es empezar un camino de encuentro con los sabores, las historias y las sierras de Córdoba. Con amplios ventanales y extensas mesadas repletas de frascos y bolsitas, el lugar recibe a cada curioso que decide parar en Cruz Grande (La Cumbre).

El lugar tiene alma y eso se nota a golpe de ojo. Todos los frascos están prolijamente acomodados. Las palabras casero, artesanal y natural se repiten en cada una de las etiquetas que resaltan en los diferentes rincones del mercado.

Esa alma tiene nombre y apellido. Se llama Pilar Benzi. Ella llegó desde su Santa Fe natal y nunca más se fue. Estudió Nutrición en Córdoba y, finalmente, decidió instalarse en La Cumbre con un proyecto hotelero que fue un éxito. Sin embargo, se cansó y decidió apostar por lo que más le gustaba: compartir la cocina, los sabores y los productos locales con otras personas.

"Soy guardiana de los productos. Cuando abro un frasco, lo elijo porque me gusta. Pero tiene que sentirse como hecho en casa", contó Pilar. Una cosa está garantizada en el mercado: todo fue previamente probado y elegido por ella.

Cada receta tiene su historia

Además de las conservas y los dulces, Pilar incorporó a su mercado algunas recetas que marcaron su infancia. Tal es el caso de las galletitas Brislé, de tradición Suiza, que llegaron a sus manos de la mano de su abuela Nelly.

Con ella se pasaba horas en la cocina "jugando" a hacer estas galletitas que llevan manteca, harina, azúcar, huevos, limón y naranja. Si bien nunca pensó en venderlas, fueron los turistas los que la incentivaron para hacerlo. 

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"El cordobés que venía seguido fue el que me incentivó a transformarlas en lo que son ahora. Todos me preguntaban por lo que servía en la mesa porque querían llevárselos a su casa", agregó Pilar. Las galletitas se venden en latas con un diseño muy cuidado y profesional. 

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A esta primera receta, le siguió otra que también es un éxito: la torta galesa. La historia está íntimamente relacionada con La Cumbre. Fue Don Monty Miller, un personaje localmente conocido, el que le pasó la receta. "Él cocinó conmigo y me eligió para que yo sea quien difunda su receta", comentó Pilar.

Hoy es uno de sus productos estrella y parte de la identidad del mercado. "Muchas veces me pregunto: ¿cuál es el legado de estas personas?. No es la torta o las galletitas, es saber pasar la antorcha a tiempo", explicó.

Con aroma a sierras

El olor a hierbas serranas también está presente desde la puerta de entrada. Como parte de la evolución del mercado, Pilar incorporó un pedacito de La Cumbre entre sus mesadas. Lo hizo con diferentes presentaciones y bajo el nombre de Hume.

"Es la mezcla de hierbas autóctonas y no autóctonas. Le puse ese nombre por un filósofo inglés y la idea es sentarse a tomar el té con yuyitos de las sierras", explicó.

Hume también tiene una historia especial. Fue un fin de semana, cuando un motoquero que venía desde Córdoba, le pidió un té digestivo. Si bien antes sacaba un saquito que compraba en el súper, un día decidió preguntarle si no quería probar una mezcla que ella misma hacía.

"Yo tengo los cajones de mi casa llenos de hierbas que salgo a recoger por la zona. Le llevé una mezcla que tenía y esa bolsita no volvió más. Así llegó al mercado", añadió. Lavanda, suico, melisa, poleo y tilo son algunas de las que aparecen en Hume.

El Mercado de Pilar Benzi es un encuentro con las historias, los sabores y las sierras. Es una caricia al alma que puede empezar con un té calentito, un bocado de una torta o con un frasco de algún sabor de la infancia.

"En mi vida me conecté con los sabores jugando con mi abuela, desde mi carrera profesional y hoy desde este lugar. Fui mutando y encontré lo que mas me identifica", concluyó Pilar.

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