Este año el minimalismo toma color en el hogar

El comienzo de un nuevo año es siempre una oportunidad para renovar las energías y un punto de inflexión para las modas. El interiorismo no es ajeno a este proceso y ya tiene pensado cuáles serán las tendencias para el 2024.

En esta oportunidad, el minimalismo continuará siendo una influencia importante en el diseño de interiores, pero con un giro en el uso del color. Adiós al blanco y los tonos neutros para conseguir espacios limpios y sosegados.

El 2024 se caracterizará por ambientes asépticos, pero con toques cromáticos audaces en techos, muebles, obras de arte o accesorios. El contraste entre la sencillez y la vitalidad creará una sensación de equilibrio y energía. ¡Grupo Edisur te cuenta todos los detalles!

Lo que se viene...

El minimalismo en el diseño de interiores es un estilo donde prevalece lo utilitario frente a lo meramente decorativo. Surgió en la década de 1920, sin embargo se considera futurista por su estética blanca brillante y su filosofía de priorizar el equilibrio en los espacios y en la vida.

La forma más sencilla de integrar color a un espacio minimalista es mediante plantas. Unsplash.

No obstante, hay un gran puñado de personas que rechazan este concepto por la simplicidad de su paleta de colores, mobiliario y accesorios, que cubre desde el techo hasta el piso de los espacios. Para ellos, tenemos buenas noticias: al ser monocromático, es muy sencillo elevarlo de nivel mediante una herramienta de interiorismo básica, como es el color.

El minimalismo pastel

Los colores pastel han compartido reinado de popularidad con el minimalismo durante las últimas temporadas, pero se avecina una tendencia en la que ambos elementos se unen para crear una sinergia que no sabíamos que necesitábamos.

El minimalismo pastel se trata de agregar tonos de esta gama dentro de la decoración, de modo que los detalles realcen el estilo en lugar de competir con él.

La esencia minimalista queda intacta, los espacios siguen siendo limpios y sólo cuentan con lo esencial, pero mejoran con un toque de color que añade alegría y frescura a la calma y serenidad que ya tenían.

¿Cómo integrar el minimalismo pastel?

Si querés integrar la tendencia a tu hogar de manera segura, podés aplicar la clásica técnica de los tres colores —un pilar del minimalismo, por cierto—: elegir uno base para áreas grandes como las paredes, uno secundario para zonas medianas (cama o muebles predominantes) y otro para acentos que podés destinar para accesorios.

Otras ideas para aplicar esta regla son las siguientes:

Muebles y fundas de almohadones: son fáciles de cambiar y accesibles. Traerán inmediatamente el cambio que exige el minimalismo pastel. Si necesitás comprar otro sofá o renovar el existente, entonces elegí uno de color.

Obras de arte: no necesitás cambiar el color de tus paredes blancas, simplemente agregá un toque de color sutil en tu espacio con estos elementos.

Muebles y decoración: conseguí un sillón o mueble pequeño en el tono pastel secundario y situalo en un bonito rincón. Luego añadí accesorios del tono acento para complementar el área, como una lámpara o una mesa.

Vegetación: la forma más sencilla de integrar color a un espacio minimalista es mediante plantas. Para cumplir con la tendencia en cuestión debés elegir sólo las que sean de tonalidades pasteles, como la lavanda o el eucalipto.

No necesitas cambiar el color de tus paredes blancas, simplemente agregá un toque de color sutil en tu espacio con estos elementos. Unsplash.

Si querés arriesgarte un poco más de la cuenta, podés pintar la pared central con un tono pastel. El cambio será refrescante y te permitirá mantener el resto del mobiliario y accesorios en colores neutros, lo que funciona perfecto si ya los tenías en tu hogar.

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