Trazabilidad ganadera, sí o sí

A fines del mes pasado entró en vigencia la Resolución 1115/2023 de la UE que regula la importación de productos con ese destino que tengan origen en campos ligados a la deforestación. 

Esto quiere decir que todos aquellos establecimientos que tengan deforestación después del 30 de diciembre del 2020 serán excluidos como proveedores de la Unión Europea para los productos madera, soja y todos los derivados del ganado bovino

sostiene Andrés Costamagna, referente de la Comisión de Sostenibilidad de la Sociedad Rural Argentina (SRA) y miembro de la Sociedad Rural de Jesús María, a El Campo Hoy. 

El ruralista aclara que la normativa no solamente alcanza a la carne vacuna, sino también los cueros, las glándulas, y la menudencias. 

Desafío inmediato 

Según Costamagna, el desafío que tiene toda la cadena es ponerse de acuerdo para tener una respuesta única como cadena en la que no puede quedar nadie afuera.

Hay que controlar desde el ternero hasta los productos cárnicos cuatro años después de nacido el ternero, eso va a obligar a tener un sistema de trazabilidad total de la ganadería argentina

Vale la pena aclarar que la normativa ya está vigente a partir del 29 de junio pasado, alcanzando desde Tierra de Fuego hasta Jujuy.

Nuestro país ya arranca con un estatus de país "estándar", pero según Costamagna "debemos tratar que el gobierno argentino (el actual y el futuro) logre que Argentina sea calificado como de bajo riesgo, para que podamos cumplir con esta normativa de manera sencilla y simple".

Una gran oportunidad 

Consultado si es un problema o una oportunidad, expresó que es la oportunidad de que ordenemos la cadena. "En un inicio de trazabilidad general con certificación de procesos, pero sabemos que muchos ganaderos no están dispuestos a este esfuerzo y que serán grandes desafíos para poder movilizar en este sentido a toda la cadena argentina".

También opinó que el mensaje es que si no se hace el esfuerzo a nivel público y privado esto no se podría llegar a alcanzar. "Esto tiene que ser que el Estado está colaborando con los privados, brindando toda la información del Senasa, de la dirección de Bosques de Medio Ambiente de Nación para tener información completa y veraz con transparencia. Y el trabajo de los productores y la cadena en general colaborando para compartir la información de manera trazada y transparente es muy grande. Porque si no nos  ponemos de acuerdo, no nos van a comprar y perderíamos el mercado por una discusión de intereses sean estatales o sean privados". 

En ese sentido, remarcó que de acá en adelante queda trabajar con los integrantes de la cadena de la soja para que se puede sacar de experiencia de aprendizaje algo de lo que ellos han implementado.

Y opinó que 

no hemos sido lo suficientemente eficaces en sensibilizar a la cadena de carne y ahora la norma ya llegó

Ahora lo tenemos al problema encima "pero tenemos un año para resolverlo y veremos si podemos sumarnos a la estrategia que tiene la soja o diseñamos una estrategia nueva para lograr la meta en la carne".

Además, aclara que la limitaciones ya existen de hecho. "Lo que todos decían que no iba a pasar por un tema de seguridad alimentaria ya pasó, y hoy ya tenés supermercados argentinos que no compran novillos de zonas con bosques nativos. O sea que no existe lo normativa todavía en vigencia y ya en el comercio de carnes argentino hay una limitante para los productores que están en el medio". 

Una coyuntura que no ayuda 

Finalmente, Costamagna resalta que tenemos muchos problemas por intoxicación con nitratos y nitritos en pasturas y en los verdeos, fruto de que la sequía paralizó ese nitrógeno aunque hoy hubo algunas lluvias en provincia de Buenos Aires y eso "va a aflojar un poco la oferta".

Y manifestó que 

vamos a terminar un año con alta faena, alto consumo y por eso el camino es subir la producción para abastecer el consumo interno y abastecer a la exportación, pero lamentablemente no lo estamos haciendo.

"Tenemos grandes desafíos, porque cada vez tenemos menos vacas para evitar que si no dejan de intervenir en la cadena de ganado, la gente va a comer mucho pollo y muchos cerdos".