Sorprenden el racismo y la misoginia de algunos espectadores

Por María Rosa Beltramo

Algunos no lo vieron venir. Cuando se inició "La casa del dragón", precuela de "Juego de tronos", artistas y productores evaluaron las  eventuales polémicas que podrían acarrear la evolución de algunos personajes, pero no esperaron reacciones adversas guiadas por la misoginia y el racismo.

En un programa de la televisión norteamericana, la actriz, productora y directora Whoopi Goldberg se refirió a las protestas de espectadores no sólo de "La casa del dragón" sino también de "Los anillos del poder".

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"Quiero empezar diciendo que estos programas no son reales, ¿de acuerdo? La nueva serie de El señor de los anillos, Los anillos del poder, y la precuela de Juego de Tronos, La casa del dragón, son grandes éxitos, pero no existen en el mundo real, ¿está bien?”, comenzó Goldberg.

Y subrayó: “No existen los dragones ni los hobbits, sabemos eso. Pero hay críticos que dicen que ambas son ‘demasiado woke‘ al agregar, sí, personajes diversos. ¿Me estás diciendo que los negros no pueden ser personajes falsos también? ¿Es eso lo que me estás diciendo? […] Gente, ¿qué está mal con ustedes?”.

Tan indignado como ella se declaró  el británico Steve Toussaint, actor negro que  interpreta a Lord Velaryon en la precuela de "Juego de tronos".

“La gente es feliz viendo a un dragón volar. Son felices viendo cabellos blancos y ojos violetas, pero ¿ver a un hombre negro siendo rico? Eso no lo aceptan”. 

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Sostuvo, no obstante que, “por cada persona tóxica que ha encontrado su camino hasta mis redes, han habido muchos otros que han mostrado su apoyo”.

La serie  está ambientada en un continente ficticio en el que, además, prolifera la magia como elemento real y hay dragones como armas de batalla.

En las últimas temporadas de Juego de Tronos se había producido una discusión pública sobre el uso de violencia sexual para apuntalar la trama.

Desde el sexo no consentido que padeció Daenerys Targaryen durante la primera temporada — romantizado en la serie— hasta la violación de Sansa Stark en una traumática escena explícita. 

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 Al mismo tiempo, despertó un debate acerca de la percepción de la agresión sexual como forma de evolución de sus personajes. Para la temporada ocho, los desnudos y escenas sexuales violentas en la serie habían prácticamente desaparecido del argumento. 

Justamente en la presentación formal de la precuela, los showrunners  anticiparon  que la historia "explorará la misoginia y el patriarcado a través de Rhaenyra y Alicent".

Uno de los aspectos más interesantes es la determinación de enfocar la historia enteramente en el camino femenino y como una denuncia al patriarcado y su temor constante de perder poder.

Para los creadores, la decisión de dar prioridad a las mujeres sigue una lógica ya presentada en la serie original y es el camino adecuado para hacer de la trama algo más natural y relevante, pero en las redes sociales muchos fanáticos dijeron que "es intolerable" que las mujeres asuman roles de tanto poder.