Un papa con raíces latinoamericanas: cuál es el vínculo de León XIV con Perú
El periodista y docente peruano Ruperto Arroyo rememoró el paso del nuevo pontífice en tierras peruanas: “Era común verlo en pantalones cortos, raqueta en mano, jugando tenis o ping-pong con la comunidad”.
08/05/2025 | 17:37Redacción Cadena 3
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En menos de 24 horas, el cónclave en la Capilla Sixtina dio al mundo una sorpresa histórica: Robert Prevost, un estadounidense con nacionalidad peruana, fue elegido como el nuevo Papa, asumiendo el nombre de León XIV.
Más allá de su origen en Chicago, es su profunda conexión con Perú, forjada en las calles de Piura y consolidada en la Diócesis de Chiclayo, lo que hace de este pontificado un hito para América Latina. León XIV no solo lleva el peso de liderar a 1.300 millones de católicos, sino también el orgullo de un país que lo adoptó como suyo.
De misionero en Piura a ciudadano peruano
Nacido en 1955, Robert Prevost sintió el llamado de la fe desde joven. En 1977 ingresó a la Orden de San Agustín, fue ordenado sacerdote en 1982 y, apenas tres años después, llegó al Perú como misionero en Chulucanas, Piura.
En Chiclayo, Prevost se ganó el corazón de los fieles con su cercanía. Como contó a Cadena 3 Ruperto Arroyo, periodista y docente universitario peruano, “era común verlo en pantalones cortos, raqueta en mano, jugando tenis o ping-pong con la comunidad”.
Pero más allá de su calidez, Prevost destacó por su firmeza. En una ciudad golpeada por la corrupción municipal, su voz resonaba en los Te Deum del aniversario de Chiclayo, cada 18 de abril, exhortando al diálogo y la justicia. “Siempre ponía por delante a los que menos tienen, visitando poblaciones alejadas y conviviendo con ellas”, recordó Arroyo.
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Una continuidad con Francisco
La relación entre Prevost y Francisco, de quien fue cercano colaborador, es clave para entender su pontificado. En 2023, Francisco lo llamó a Roma como prefecto del Dicasterio para los Obispos y presidente de la Pontificia Comisión para América Latina, roles que lo posicionaron como una figura influyente en la curia. Para Arroyo, no hay dudas: “León XIV es una continuidad de Francisco”.
Su estilo directo, su lucha contra la inseguridad y la corrupción, y su compromiso con los marginados reflejan los valores del papa argentino.
En Perú, esta continuidad se vive con orgullo. “No lo sentimos como un papa estadounidense, sino como un papa peruano”, afirmó Arroyo. La salida de Prevost de Chiclayo en 2023 fue un momento de tristeza para la diócesis, pero su elección como papa ha desatado una celebración nacional.
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Un líder para tiempos difíciles
León XIV asume el papado en un mundo marcado por conflictos, desigualdades y desafíos para la Iglesia. Su experiencia en Chiclayo, donde enfrentó problemas sociales con un discurso frontal, lo prepara para liderar con valentía. “Ha sido claro en promover el encuentro y escuchar a los ciudadanos”, señaló Arroyo, destacando su capacidad para dialogar con el poder político sin temor, como cuando exigió transparencia en casos de corrupción local.
Su formación agustiniana, que enfatiza la vida en comunidad y la pobreza compartida, también moldeará su pontificado. Como prefecto del Dicasterio para los Obispos, Prevost demostró rigor y visión, cualidades que ahora llevará al trono de Pedro. Su mensaje inicial desde el balcón de San Pedro, centrado en la paz y la fraternidad, resonó especialmente en Perú, donde las campanas de Chiclayo repicaron en su honor.
