Relatoras Argentinas busca una voz femenina para el fútbol

Soplan vientos de cambio en la sociedad que obligan a reescribir muchas historias y a buscar nuevos perfiles laborales. En Argentina tradicionalmente el fútbol era un espacio gobernado y protagonizado por los varones, aunque siempre hubo mujeres que, si bien en la periferia de la actividad, rivalizaban en pasión por el juego y todo el universo que lo rodea.

La Televisión Pública, dispuesta a alentar la inclusión y a ponerse a tono con los tiempos que corren, puso en marcha Relatoras Argentinas, un reality del que saldrá una voz de mujer para contar el fútbol y que ha reunido a 16 aspirantes a acompañar alguna vez esas imágenes que disfruta todo un país y ponerles la emoción, la precisión y la pausa de una narración única.

/Inicio Código Embebido/

/Fin Código Embebido/

Se sabe que la misión es compleja porque cuesta mucho acceder a la popularidad que han obtenido estrellas como Víctor Hugo Morales o nuestro Bocha Houriet. Demanda toda una vida de mirar partidos, crear esas muletillas que después repiten, sin discusión y como un rezo, los chicos cuando sueñan con un gol que les cambie la vida.

/Inicio Código Embebido//Fin Código Embebido/

No será simple, en consecuencia, transformar a esas mujeres empeñosas pero inexpertas en voces autorizadas para contar un partido, pero la preparación ya empezó. El reality va de martes a viernes a las 22 y los domingos a las 21. La primera diferencia con los otros programas similares que existen en el país y el resto del mundo y que implican algún tipo de concurso, es que aquí decidieron aportar un jurado más técnico que histriónico y entre las 4 figuras elegidas no hay ninguna a la que le toque el papel de malo que los expertos consideran indispensable para el rating del programa.

/Inicio Código Embebido/

/Fin Código Embebido/

Los encargados de evaluar a las 16 participantes son los reconocidos Walter Nelson y Miguel "Tití" Fernández -un relator experimentado y el más popular de los cronistas de cancha- y Viviana Vila, del equipo de Víctor Hugo Morales, locutora y docente universitaria y Evelina Cabrera, entrenadora, mánager deportiva y cofundadora de la Asociación Femenina de Fútbol.

/Inicio Código Embebido//Fin Código Embebido/

El programa funciona como un torneo con dos zonas de 8. Las chicas compiten de a dos; cada una ocupa una cabina como si estuviera en pleno estadio y mientras la primera relata el segmento de partido que le ha tocado en suerte, su rival escucha música. La misma jugada tendrá luego la narración de la otra participante.

Las candidatas a relatoras tienen entre 19 y 40 años y experiencias diversas. Hay varias que proceden de la esfera de las escuelas y facultades de periodismo, del Instituto Superior de Estudios Radiofónicos o del deporte, como jugadoras o entrenadoras. El factor común es la pasión por el fútbol y la necesidad de compartir experiencias.

/Inicio Código Embebido/

/Fin Código Embebido/

Después de una búsqueda que duró un par de meses se anotaron en el reality Aldana Lamberti, Carolina Zalez, Sabrina Otaegui, Aylén Romanchuk, Estefanía Pineda, Ivana Lanuto, Sofía Maiza, Brenda Melgar, Ariana Isasi, Anabella Martínez, Lola del Carril, Verónica Córdoba, Romina Toledo, Yasmín Graciano, Laura Corriale y Sol Rivero.

Para que ensayen repentización y se vuelvan creativas, las aspirantes tienen que narrar desde goles históricos conquistados por figuras nacionales o extranjeras a jugadas fallidas, pifias increíbles, incidentes de los que transforman un partido en un ring de boxeo o instancias definitivas, de esas que cada espectador lleva guardadas en su memoria porque significaron un campeonato, un ascenso o también el dolor de una caída en clave de frustración colectiva.

Hay además anécdotas deliciosas de las largas carreras de Walter Nelson y Tití Fernández, testigos ambos de buena parte de la historia contemporánea del deporte nacional. Para alentar a las competidoras, en una de las últimas ediciones, la producción mostró aquel round final de la pelea entre Julio César Chávez y Sergio Martínez donde Walter gritó el ahora célebre “¡salí de ahí, Maravilla!”, dirigido al púgil argentino, que hizo subir las pulsaciones de los espectadores. Contó que recibió entonces llamadas de medios de distintos países, subyugados por la emotividad del relato y que después de décadas de hacer su tarea tuvo un minuto de fama continental.

La gala especial está reservada para los domingos. Ese día hay una disputa mano a mano donde la ganadora se lleva los tres puntos indispensables para consolidarse en la dichosa tabla de la que saldrá la relatora campeona. En la conducción, con el oficio acostumbrado está Mariano Peluffo, hábil para manejar los tiempos y para darle espacio a la emoción o al humor, según convenga al ritmo del programa.

Por María Rosa Beltramo.