Cómo hacen los pobres para sobrevivir: un informe sobre el hambre que nunca pasa

En medio de crecientes preocupaciones sobre la relación entre pobreza y criminalidad en Argentina, Javier Auyero, sociólogo de la Universidad de Texas y experto en investigación sobre la vida en sectores populares, ofrece una mirada esclarecedora sobre la complejidad de esta problemática. Coautor del libro "Cómo hacen los pobres para sobrevivir (Siglo XXI)", Auyero ha estado profundizando en las interacciones entre la falta de oportunidades, la violencia y la búsqueda de supervivencia en comunidades marginadas.

Minorías ruidosas y la verdadera realidad

Auyero destaca que, aunque la criminalidad puede ser una estrategia de supervivencia, la mayoría de los jóvenes en los barrios no son delincuentes ni adictos, señalando que una minoría ruidosa aterroriza a los vecinos. Además, subraya que las principales víctimas de los robos y asaltos son los propios pobres, cuya realidad se ve afectada diariamente por la falta de seguridad. 

"El discurso público expresa preocupación ocasionalmente cuando asaltan en otros barrios, pero las principales víctimas son los pobres, quienes lo sufren a diario. El código de no robar en su propio barrio se ha roto, y son asaltados constantemente", expresó a Cadena 3.

Rehenes de la política, prisioneros de la desesperanza 

El experto también destaca la relación entre la política y la criminalidad, donde la falta de intervención policial y la influencia de campañas políticas con clientelismo crean oportunidades para la delincuencia. Además, señala que el aumento en la violencia está vinculado a una creciente desesperanza en los sectores marginados, donde las oportunidades laborales son escasas y la informalidad prevalece. 

"Esta ruptura social tiene que ver con la pobreza, la criminalidad, pero también con la política. Cuando los policías miran hacia otro lado o hay campaña política con clientelismo, es una forma en la que estas personas acceden a una vivienda, por ejemplo. Es uno de los mecanismos. Aunque hoy ves las elecciones y te das cuenta de que eso no garantiza la victoria", señala.

Y agrega: "A los más pobres se les atribuye la culpa de todo: la criminalidad, el déficit fiscal y ahora también votar a Milei".

En este contexto, Auyero se refirió al problema de las adicciones que afecta a estas poblaciones: "Tan dramático como el tema de las adicciones es la realidad de que la abrumadora mayoría de los jóvenes en estos barrios no son delincuentes ni adictos. Hoy estamos en la tercera generación de adictos a las drogas. No hay familias ni contención". 

Y explicó que existen dos soluciones: instituciones formales e informales, que han demostrado disminuir la criminalidad. Las formales son el mercado de trabajo y las escuelas, y las informales son la familia. 

"En estos barrios, es necesario crear una sensación de comunidad y comunidades, ya que eso funciona como mecanismo de control informal. En el último capítulo, pasamos 6 meses trabajando en un comedor comunitario. Más allá de proporcionar comida, las mujeres, que no reciben ninguna retribución económica por lo que hacen, intentan generar estos lazos comunitarios". 

Entrevista de Rodolfo Barili