Alberto Fernández reconoce el pésimo clima social

Sergio Berensztein

-El presidente le tomó la promesa de lealtad a la bandera a un grupo de unos mil estudiantes. Pronunció un discurso corto y no tuvo trato con la prensa. Obviamente no quiso hablar del avión, pero tuvo palabras muy interesantes respecto de efectivamente lo que él admite. Argentina no es ese país sin futuro que algunos quieren pintar, dijo.

-Habló también de prepararse para un futuro, para contar una nueva Argentina. El presidente, finalmente, frente a los estudiantes, reconoce la importancia de la meritocracia y reconoce que efectivamente, el clima en el cual estamos es un clima de malhumor social.

-Es un presidente que reconoce que las cosas no están bien .En el día anterior había dicho que Argentina está volando, que estaba creciendo, que crecían las exportaciones , que baja el desempleo. Bueno, en la típica forma de Fernández, una de cal y otra de arena al día; reconoció que las cosas no estaban tan bien.

-Por otro lado, la vicepresidenta que más o menos reconoce lo mismo, pero obviamente desentendiéndose de su gobierno, sobre todo en materia económica. Es muy importante lo que hizo Cristina con un discurso muy hedonista, muy anti empresario. Le echó la culpa a los empresarios .

-Otra vez desarrolla su teoría de que la inflación no tiene que ver con el déficit fiscal sino con actitudes empresariales que explicarían este fenómeno. Es raro que solamente en Argentina pase eso y que en la década del noventa con otra política monetaria no pasase. Los empresarios se volvieron malos justamente a partir del momento en el cual aumentó mucho el déficit fiscal del 2005 .

-Fue un discurso en el cual cada dardo a la administración de Alberto Fernández será celebrado obviamente por la gente que se convocó allí.