Rally de Portugal: Con sus espectaculares multitudes, hoy comienza la cita lusa

Portugal. Sólo pronunciar la palabra evoca imágenes fantásticas con los Toyota atronando por las carreteras de Arganil o de Markku Alen desafiando a la niebla de Fafe metida en su camino.

Hablando de Fafe, es el lugar al que todos quieren llegar a tiempo para el domingo por la mañana.

Es un espectáculo absoluto ver un Rallye 1 volando, con los molinos de viento claramente visibles de fondo.

Y eso sólo el domingo. El ya mencionado Arganil, el lugar en las colinas con tantos secretos del pasado sigue siendo igual de relevante hoy en día. El viernes se escribirá otro capítulo de su sensacional pasado en el WRC.

Las pistas son desafiantes, las personas, unas de las más amables y acogedoras del mundo y el pescado casi salta del Atlántico a la mesa a través tras cocerse en las parrillas con mejor aroma de la historia.

¿Y la buena noticia? Va a haber sol. O eso es lo que se dice por aquí. La lluvia no aparece mientras el WRC se prepara para correr en un lugar épico continuando la temporada de tierra: Portugal.

El programa marca que tras la ceremonia de salida del jueves por la noche en Coimbra, la cuarta ciudad más grande del país y antigua capital, la acción comienza el viernes por la mañana con dobles pasadas por Lousã (12,03 km), Góis (19,33 km) y el clásico Arganil (18,72 km), separados por una zona de montaje de neumáticos en el mismo Arganil.

La etapa termina con un único paso por Mortágua (18,15 km) y una superespecial en Figueira da Foz (2,28 km), que figuró por última vez en el itinerario en 1997.

Son más de 120 km de competición. Los problemas mecánicos podrían salir muy caros, ya que no se permite realizar ninguna reparación hasta que los competidores regresen a Matosinhos por la tarde, salvo las que realicen las propias tripulaciones con las herramientas que llevan en sus coches.

La jornada del sábado también es muy complicada, con casi 150 km repartidos en dos bucles idénticos de tres tramos por las montañas de Cabreira, al noreste de Matosinhos.

Los pilotos tendrán que pasar dos veces por Vieira do Minho (26,61 km), Amarante (el tramo más largo del fin de semana, con 37,24 km) y Felgueiras (8,91 km). Los bucles se dividen por una asistencia antes de una espectacular superespecial en el circuito de rallycross de Lousada (3,36 km), el favorito de los aficionados, que completa la acción.

El itinerario del domingo gira en torno a la extraordinario Fafe, su gran salto antes de la meta y las grandes aglomeraciones de públic.

Cuatro tramos agrupados en torno a la ciudad comienzan con Paredes (15,00 km). Fafe (11,18 km) y Cabeceiras de Basto (22,23 km) son las siguientes antes de una segunda pasada por Fafe, el Wolf Power Stage que cierra el rallye y que ofrecerá importantes puntos extra.

Los 19 tramo suman 329,06 km en un recorrido de 1.636,25 km antes de la meta del domingo por la tarde en Matosinhos.

Cadena 3 Motor, sobre un reporte y fotografías de wrc.com