El cordobés que vivió con pandilleros en El Salvador y apoya a Bukele: "Me gustaría que pase en Argentina"

Marcos Calligaris

El cordobés Andrés Di Fini, miembro de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, realizó una misión en El Salvador entre 2011 y 2013, donde se sumergió en la cultura local y experimentó la calidez y el gran sentido del humor de sus habitantes. 

Durante su estadía, visitó Acajutla y las provincias de Sonsonate, Santana y Ahuachapán.

En Acajutla, Di Fini tuvo que adaptarse a las costumbres gastronómicas salvadoreñas, como comer con las manos y degustar platos típicos como las pupusas, elaboradas con frijoles, arroz, tortillas y huevo. "Una comida típica son las pupusas que creo que cualquiera que lo coma le va a encantar", comentó Andrés a Cadena 3. 

A pesar de las condiciones difíciles de algunos hogares, remarcó disfrutó de la sencilla pero deliciosa comida local.

A lo largo de su misión, Andrés entabló vínculos con personas de distintos estratos sociales, incluidos pandilleros. 

Aunque no mantiene contacto con ellos, tiene buenos recuerdos y celebra el avance del país "hacia la paz" bajo el mandato del presidente Nayib Bukele. 

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"La verdad que ahora se vive en paz, una paz donde podés caminar tres cuadras para ir a comprar y podés ir con el celular en la mano caminando y nadie te va a robar, nadie te va a hacer nada porque hay paz", menciona Di Fini. La economía y el turismo han mejorado, según destacó, ya que se permite visitar lugares antes inaccesibles.

"Se terminó la delincuencia gracias a Bukele. Me encantaría que en Argentina pase lo mismo", subrayó.

También resaltó que el dinero "dura más" porque no tienen que pagar las rentas, que sería lo que debían pagar a los pandilleros para que no les haga nada, que no era poco.

Uno de los momentos más memorables del joven en El Salvador fue cuando jugó un partido de fútbol callejero con jóvenes locales en un barrio peligroso, en el que se apostaban bolsas llenas de monedas de 25 centavos de dólar. "Jugamos entre pandilleros y asesinos", contó.

Tras ganar el encuentro, Andrés y su compañero utilizaron el dinero del premio para comprar comida y bebida para compartir con la comunidad, ganándose su afecto y admiración. "Fue una experiencia linda porque como digo, a mí me encanta muchísimo el fútbol", recuerda Andrés. Incluso regaló camisetas de fútbol con su apellido, que muchos salvadoreños aún conservan y utilizan. "Les encanta Messi, me recibían con los brazos abiertos", rememoró.

Di Fini vistió El Salvador en más de una ocasión y afirma que no dudaría en regresar, ya que considera al país centroamericano un lugar hermoso y lleno de experiencias enriquecedoras. "Si pudiera volver a El Salvador, de hecho volví, volví en el 2014 o 2015 y  ahora si pudiera volver volvería de nuevo porque es un país lindísimo, lindísimo", cerró.

Informe de Marcos Calligaris, enviado especial de Cadena 3 a El Salvador.