El bebé que sobrevivió a la tragedia de Villa Devoto mejora en el hospital
El menor de 18 meses, único sobreviviente, muestra signos de mejoría en el Hospital Ricardo Gutiérrez. Las pericias apuntan a fallas graves en la caldera y la falta de ventilación como causas del accidente.
03/07/2025 | 18:00Redacción Cadena 3
El bebé de un año y medio, único sobreviviente de la tragedia ocurrida el martes en una casa de Villa Devoto, donde cinco miembros de una familia fallecieron por intoxicación con monóxido de carbono, evoluciona favorablemente.
Según el último parte médico al que accedió Infobae, el menor permanece en la Unidad de Cuidados Intensivos Infantil del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, utilizando asistencia respiratoria mediante una cánula de alto flujo, pero sin necesidad de medicación inotrópica ni vasopresora.
Los médicos informaron que su función cardíaca muestra una mejora significativa, aunque continúa bajo monitoreo estricto.El hecho, que conmocionó al barrio, se produjo en una vivienda ubicada en Sanabria al 3700, a una cuadra de la estación de tren de Villa Devoto.
Las víctimas fueron identificadas como Demetrio De Nastchokine (79), su esposa Graciela Just (73), su hijo Andrés De Nastchokine (43), su pareja Marie Camille Lalanne (40) y su hija de cuatro años. Los últimos tres residían en Italia y estaban de visita en el país junto al bebé sobreviviente.
Los cuerpos fueron hallados tras un llamado al 911 de un familiar, y el SAME, junto con Bomberos, intervino en el lugar, constatando los fallecimientos.
Una combinación letal de fallasLas pericias preliminares, según fuentes policiales, indican que la causa de las muertes fue, “en un 99%”, intoxicación por monóxido de carbono, un gas inodoro y altamente peligroso.
Los investigadores reconstruyeron que Andrés, Marie Camille y su hija de cuatro años se encontraban en una habitación del primer piso, mientras que Demetrio y Graciela estaban en el segundo piso. El bebé, hallado en otra habitación del primer piso, presentaba signos de exposición al gas, pero su ubicación, posiblemente con mejor ventilación, fue clave para su supervivencia.
“El menor estaba lejos de la familia, en un ambiente que debía tener otro tipo de ventilación”, explicó Alberto Crescenti, titular del SAME.
El análisis técnico reveló una serie de fallas graves en la vivienda. La caldera, ubicada en la cocina, presentaba desperfectos mecánicos significativos: deflectores sueltos, un radiador obstruido por corrosión y suciedad, y un conducto de evacuación de gases con fisuras y óxido. Estas fallas permitían que el monóxido de carbono se filtrara a través de aberturas en el cielorraso y el piso flotante, acumulándose en los ambientes superiores.
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En una prueba realizada por Bomberos con polvo fumígeno, se comprobó que los gases de la combustión ingresaban directamente al interior de la casa, en lugar de ser expelidos al exterior, incumpliendo las normativas. A esto se sumó una ventilación prácticamente inexistente.
Las rejillas y aberturas de la vivienda estaban selladas con film y nailon, y las ventanas tenían cintas que impedían la entrada de aire fresco.
Mediciones realizadas junto a Metrogas detectaron concentraciones de monóxido de carbono muy por encima de los niveles seguros en todos los artefactos a gas del domicilio.Un llamado a la prevenciónLa tragedia pone de relieve la importancia del mantenimiento de los sistemas de calefacción y la adecuada ventilación en los hogares, especialmente durante el invierno.
Los especialistas subrayan que la combinación de una caldera en mal estado, caños corroídos, filtraciones de gas y una casa sellada creó un escenario letal. Mientras tanto, la evolución del pequeño sobreviviente ofrece un atisbo de esperanza en medio de la tragedia que enlutó a Villa Devoto.
