Detienen a tres hombres en Bélgica por planear ataque a políticos del país

BRUSELAS (AP) — La policía en Bélgica detuvo a tres hombres por un presunto complot para llevar a cabo un ataque de estilo yihadista contra políticos del país, después de encontrar una bomba casera en la casa de uno de los sospechosos, manifestaron fiscales federales el jueves.

Durante varias búsquedas, se encontró "un dispositivo improvisado" en la casa de uno de los sospechosos, pero no estaba operativo en ese momento. También se encontró una bolsa con bolas de acero allí, mientras que en otra residencia se halló una impresora 3D que se cree fue utilizada para fabricar partes del ataque planeado.

"También hay indicios de que la intención era construir un dron para acoplarle una carga", señalaron los fiscales.

Los tres jóvenes vivían en la ciudad portuaria de Amberes. Fueron detenidos después de que un juez antiterrorista ordenó a la policía registrar sus hogares, acompañados por perros detectores de explosivos.

Las redadas fueron "parte de una investigación sobre, entre otras cosas, intento de asesinato terrorista y participación en las actividades de un grupo terrorista", dijeron los fiscales en un comunicado.

"Hay indicios de que la intención era llevar a cabo un ataque terrorista inspirado en el yihadismo dirigido a políticos", expresaron los fiscales. No identificaron a los políticos que podrían haber sido el objetivo.

Varios medios informaron que el primer ministro Bart De Wever, exalcalde de Amberes que vive en la ciudad, era uno de los objetivos, sin proporcionar detalles sobre sus fuentes. Los fiscales declinaron confirmar los informes.

No se reveló el nombre de los sospechosos, pero fueron descritos como "adultos jóvenes", nacidos en 2001, 2002 y 2007. Dos de ellos debían comparecer ante un juez investigador el viernes. La policía dijo que el tercer sospechoso fue liberado.

Las autoridades llevan meses bajo presión debido a una serie de tiroteos en la capital, Bruselas, y al crimen relacionado con las drogas en Amberes, uno de los principales centros de envío de Europa.

El sistema de justicia belga ya estaba sobrecargado, con muy pocos jueces y personal de los tribunales para manejar casos que van desde simples procedimientos de divorcio hasta delitos mayores. Las amenazas a los funcionarios también son un peligro. Un exministro de justicia y un fiscal superior se vieron obligados a vivir bajo protección policial.

En el comunicado del jueves, los fiscales hicieron un llamado al gobierno para obtener más apoyo, diciendo que es "importante asegurar que la policía y el poder judicial siempre tengan suficiente capacidad para garantizar la seguridad de nuestra sociedad".

Señalaron que la fiscalía pública federal ha abierto unas 80 nuevas investigaciones sobre terrorismo en lo que va del año, más que el número total de casos para 2024.

El mayor ataque de Bélgica sigue presente en la memoria pública: 32 personas murieron y cientos resultaron heridas el 22 de marzo de 2016, cuando atacantes suicidas detonaron chalecos explosivos en el aeropuerto principal de Bruselas y en una línea de trenes de cercanías central.

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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.

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