"El bueno, el malo y el feo" en la política argentina

Julio Perotti

¿Se acuerdan del gran clásico del cine western de Sergio Leone, "El bueno, el malo y el feo"?

Si algo nos quedó es la maravillosa banda de sonido de Ennio Morricone, que el domingo hubiese cumplido 92 años.

Repasando la película se me ocurre que hay muchas analogías con la política argentina hoy, a partir de tres protagonistas: Javier Milei, Cristina Fernández de Kirchner y Mauricio Macri.

Lo imaginemos como un juego. .

Los personajes

El bueno (Clint Eastwood): en este caso, podríamos asociarlo con Javier Milei.

Al igual que el personaje de Eastwood, Milei se presenta como un outsider que busca cambiar el sistema establecido.

Sin embargo, al igual que "el bueno" en la película, sus métodos y motivaciones no siempre son completamente altruistas o convencionales

El malo (Lee Van Cleef): podría representar a Cristina Fernández de Kirchner.

Como el personaje de Van Cleef, Kirchner es vista por sus opositores como una figura poderosa y controvertida en la política argentina, con una larga trayectoria y acusaciones de corrupción.

Pero además hoy convertida en la principal enemiga de Javier Milei.

De hecho, en su búsqueda de centralidad, se puso en campaña y hasta insultó a Milei: "Este idiota que aprenda de Trump, que es nacionalista"

El feo (Eli Wallach): este papel podría asignarse a Mauricio Macri.

Como Tuco en la película, Macri ocupa una posición intermedia, como un político establecido pero que busca diferenciarse tanto del kirchnerismo como de las propuestas más radicales de Milei.

En el Gobierno están enojados con Macri. “Es un expresidente que apoya las líneas generales del gobierno y a veces critica la gestión, sobre todo a los que tenemos la responsabilidad de gestionar, y creo que injustamente”, decía el domingo a la noche Guillermo Francos.

La trama

Al igual que en la película, donde los tres personajes compiten y a veces colaboran en busca de un tesoro, estos tres políticos están en una constante lucha por el poder y la influencia en Argentina. Cada uno tiene información y recursos que los otros necesitan, lo que los obliga a interactuar y negociar, a pesar de sus diferencias.

El contexto

La Guerra Civil en la película podría compararse con la crisis económica y política de Argentina.

Este escenario de conflicto y caos proporciona el telón de fondo para las acciones de los personajes/políticos.

Estilo y presentación

La forma en que Leone presenta a sus personajes, con primeros planos intensos y música dramática, se asemeja a cómo los medios y la opinión pública perciben a estos políticos: personalidades fuertes y distintivas.

Moralidad ambigua

Una característica clave de la película es que ninguno de los personajes es completamente bueno o malo, todos tienen sus propios intereses y métodos cuestionables.

Esto refleja la complejidad de la política argentina, donde las alianzas cambian y las percepciones de "bueno" y "malo" pueden variar según la perspectiva.

Conclusión

Claro, podrán decir con toda razón que la realidad es mucho más compleja que una película del Oeste.

Los políticos tienen motivaciones, historias y responsabilidades mucho más complejas que los personajes de ficción.

Además, en la política real, los resultados afectan la vida de millones de personas, lo que aumenta significativamente las apuestas en comparación con la búsqueda de un tesoro en una película.

Aunque a veces uno tiene derecho a pensar que siempre están detrás de un puñado de dólares.