Flan casero de vainilla con caramelo: el postre que encanta a los argentinos

El flan, un postre que ha traspasado generaciones, se ha instalado en el corazón y las mesas de los argentinos. Su origen se remonta a la época romana, pero fue en la cocina criolla donde adquirió su personalidad única, fusionando sabores y tradiciones. 

Este postre, con su sabor suave y cremoso, se ha convertido en un símbolo de celebraciones familiares y momentos especiales. Cada bocado evoca la calidez del hogar y la dulzura de la convivencia. La variante que aquí se presenta, el flan casero de vainilla con caramelo, es un clásico irresistible que invita a ser compartido.

La preparación del flan es sencilla, pero requiere atención a los detalles. La calidad de los ingredientes es fundamental; por lo que se recomienda utilizar leche fresca, huevos de granja y extracto de vainilla puro, que realzan el sabor del flan. Para el caramelo, el equilibrio entre dulce y amargo es crucial, logrando esa cubierta brillante que corona este postre. La magia del flan radica en su cocción lenta, proporcionando una textura uniforme y un sabor que conquista a todos.

Este flan se convierte en el broche de oro de una comida familiar, especialmente en fechas festivas como el Día de la Madre, Navidad o cumpleaños. En estas ocasiones, es habitual que los familiares se reúnan en torno a la mesa, donde el flan ocupa un lugar de honor, compartiendo anécdotas mientras se disfruta de este manjar. Además, su versatilidad permite acompañarlo con diversos complementos, como crema de chantilly, frutas o helado, ampliando las posibilidades de degustación.

/Inicio Código Embebido/

/Fin Código Embebido/

La complejidad del flan radica en su simplicidad. Convertido en un referente de la repostería argentina, en cada casa se guarda una receta familiar, con pequeñas variaciones que hacen de cada flan algo único y personal. Por eso, al sentarse a disfrutar de un flan, se están saboreando no solo un postre, sino la historia y la tradición que lo acompañan.

Pasos

1. En una cacerola, calentar el azúcar a fuego medio, revolviendo constantemente, hasta que se caramelice y adquiera un color dorado. Retirar del fuego y verter el caramelo en el molde para que se enfríe y endurezca. 2. En un recipiente, batir los huevos con el azúcar hasta que estén bien mezclados. 3. Calentar la leche con la vainilla en una cacerola a fuego medio. 4. Incorporar la mezcla de huevos a la leche caliente, revolviendo constantemente. 5. Verter la mezcla en el molde sobre el caramelo. 6. Cocinar a baño maría en el horno precalentado a 180°C durante aproximadamente 60 minutos, o hasta que el flan esté firme. 7. Dejar enfriar y desmoldar. Servir frío y disfrutar.

Ingredientes

- 1 taza de azúcar para el caramelo
- 4 huevos
- 1 taza de azúcar
- 4 tazas de leche fresca
- 1 cucharada de extracto de vainilla

Temas