Llegó "Capitani" para mejorar la oferta de policiales

Por María Rosa Beltramo

Luxemburgo es un pequeño país que no llega a los 650 mil habitantes y, sin embargo, posee una incipiente industria cinematográfica de algunas de cuyas manifestaciones hemos tenido noticias en festivales como el Bafici, que en su vigésima edición estrenó, por ejemplo, “Gutland” de Govinda Van Maele.

Pero ahora no hay como las plataformas de streaming para que el mundo conozca en tiempo récord producciones que antes tenían que recorrer un camino lleno de obstáculos para vencer las barreras que imponen la distancia y el desconocimiento.

Netflix presentó en 2021 la primera temporada de “Capitani”, un policial clásico y de calidad, cuyo título reproduce el apellido de un policía interpretado por Luc Schiltz, no demasiado original-callado, eficiente, con problemas personales-pero con el atractivo imprescindible para que el espectador siga una investigación muy enredada.

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La serie creada por Thierry Faber presentaba en su capítulo inicial el hallazgo del cadáver de una adolescente en el bosque que rodea al poblado de Manderscheid, en el norte de Luxemburgo. Los 12 capítulos de la temporada inicial transcurren en esa zona de población escasa , donde la gente se conoce y nadie parece ser lo bastante malo para matar a una jovencita. Y sin embargo, ahí está el cadáver.

La segunda temporada encuentra a Capitani fuera de la policía aunque sin perder su instinto de investigador. En primer término cambia la escenografía. La acción se traslada al sur y a la capital de Luxemburgo, una ciudad lujosa y colorida , de poco más de 100 mil habitantes.

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El protagonista de la serie ha estado detenido y ya perdió la placa pero si quiere sobrevivir tendrá que trabajar en lo que mejor le sale. Y en esta parte de la historia- independiente de la primera temporada- aparecerá una de las obsesiones que tienen ahora algunos países europeos: la inmigración. Y en torno de ese tema central, las mafias que se ocupan del delito de trata y administran esa mano de obra esclava para cualquier tipo de negocios, incluidos el tráfico de estupefacientes y la prostitución.

En el reparto, además de Schiltz, figuran Sophie Mousel,Claude De Demo,Joe DennenwaldKonstantin Rommelfangen,Jules Werner,Jil Devresse,Julie Kieffer,Edita Malovcic ,Philippe Thelen,Edson Anibal,Adrien Papritz y Lydia Indjova.Todos perfectos desconocidos por aquí, pero sin duda con oficio para sostener el relato.

La narración de la temporada urbana de Capitani arranca cuando una prostituta llamada Bianca se ponen en contacto con Capitani para que busque a una compañera de trabajo suya que lleva desaparecida dos días. Concretamente le pide que encuentre a una rumana llamada Andreea Popescu y él no tarda en encontrarla pero por desgracia ha sido asesinada, alguien la ha apuñalado.

Bianca trabaja en un club nocturno y se puso en contacto con Capitani porque se lo pidió su jefa Valentina Daga que ahora le hace una oferta a Capitani para que trabaje para ella y él acepta.

Aunque la serie ha tenido buena recepción de la crítica , no hay acuerdo sobre la calidad de la primera y la segunda temporada. Mientras algunos señalan como un defecto que hayan quedado  demasiados cabos sueltos, otros juzgan un acierto  la aparente desconexión  entre las dos partes.

Los paisajes rurales, de la  primera parte, y el esplendor urbano de la capital, en la segunda  compensan cierta falta de ritmo.