Carlos Regazzoni, el escultor que caminaba por Buenos Aires como El Eternauta en los 80
Carlos Regazzoni se forjó de adulto como artista alternativo. En Francia alcanzó la fama. Un referente cultural de Olivos reveló una faceta de su vida desconocida hasta hoy.
20/05/2025 | 21:14Redacción Cadena 3
En los años 80, un personaje inusual recorría las calles de Buenos Aires cubierto con una máscara similar a las que utilizan los mecánicos, haciendo alusión al icónico El Eternauta. Este singular individuo era Carlos Regazzoni, un escultor que dejó una huella indeleble en la escena artística local.
Con 58 años, Regazzoni se consolidó como un emprendedor en el mundo del arte. En una librería artística ubicada en Sarmiento y Libertad, compraba pinturas y se cruzaba con un joven artista de Santiago del Estero, José Arce Galván, quien recordaba con respeto las interacciones con el enmascarado.
Desde 1988, José conoció a destacados artistas plásticos que también frecuentaban el local, incluyendo a Carlos Alonso y Libero Badii. Además, recordaba con humor los momentos compartidos con Regazzoni, quien en ocasiones olvidaba sacarse la máscara por el trabajo que estaba realizando.
Regazzoni siempre se caracterizó por su modestia y evita alardear de su fama. Luego de regresar de Francia en 2006, donde alcanzó reconocimiento internacional, decidió establecer un taller en los galpones ferroviarios de Retiro, lo que marcó un hito en su carrera.
Además de su labor como escultor, Regazzoni fue profesor de dibujo y pintura. Joseph Arce, su antiguo proveedora, lo describe como un artista singular que producía obras con materiales reciclados, logrando dar vida a esculturas de gran escala que representan una variedad de formas, desde animales hasta personajes literarios.
A pesar de haber fallecido a los 76 años en el Hospital Italiano, Regazzoni dejó un legado trascendental con más de 5 mil obras que siguen impactando tanto en el país como en el extranjero. Su estilo, basado en el uso de chatarra, hizo que sus obras cobren vida en diversas ciudades argentinas.
Conocido por su lema de que 'todo es una cuestión de tiempo', Regazzoni es recordado como un artista rebelde y genial que supo encontrar belleza en los objetos desechados, transformándolos en arte.
[Fuente: Noticias Argentinas]
