Charly García cumple 74 años: la charla inolvidable con Rony Vargas en 2008

1. Audio. Charly García, íntimo: la charla inolvidable con Rony Vargas en 2008

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En octubre de 2008, el legendario músico argentino Charly García protagonizó una de sus charlas más íntimas y reveladoras en el programa Viva la Radio, conducido por Rony Vargas. Hoy, al cumplirse 74 años de su nacimiento, aquella entrevista adquiere un valor histórico: un testimonio en el que el artista, entre reflexiones sobre la creación, la locura y el paso del tiempo, mostró la lucidez y sensibilidad que marcaron su obra.

“Yo soy partidario de escuchar los discos terminados”, decía Charly, con tono pausado pero firme. “Creo que tengo algo de artesano en eso, que debe tener todo artista: cuidar, pulir, llegar a un resultado por algo”. Entre anécdotas sobre los Beatles, Chopin y su padre guitarrista, García desplegaba una visión del arte como búsqueda constante, más cercana a la obsesión que al oficio.

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Durante la charla, Vargas lo invitó a recordar sus influencias. Charly respondió con una mezcla de humor y honestidad: “Antes que Chopin, mi papá, que tocaba la guitarra, él me enseñó la primera canción: Lili, de una película con Leslie Caron. Se puede tocar sin usar la mano izquierda”. Entre risas y recuerdos, se colaba la figura del niño prodigio que a los doce años ya deslumbraba con oído absoluto y sensibilidad clásica.

Los Beatles volvieron una y otra vez en la conversación. “Eso fue lo que me hizo cambiar. Fue lo que me dijo: componé. Para mí había una correlación entre la música clásica y esa música. Era un grito de libertad”, confesó. Esa libertad, precisamente, fue su marca de fuego y su condena: la que lo llevó a romper moldes, a reinventarse y también a chocar con los límites de la fama y la salud.

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En plena recuperación de una crisis personal, García reflexionó sobre la mirada ajena y la exigencia pública. “Esa misma gente que me dice ‘hacé otra Canción para mi muerte’ me está enchacando las pelotas, porque no me deja crear”, lanzó, entre risas y verdad. Luego agregó, con la claridad de quien nunca aceptó ser su propia estatua: “Yo reclamo mi derecho a estar en carrera. No necesito especular ni quiero. Siempre fue así”.

La entrevista también dejó espacio para la autocrítica y la visión del tiempo. “A veces gasto más energía en hacerme entender que en crear. Después, diez años más tarde, todos lo hacen”, dijo, anticipando ese destino de artista adelantado que siempre lo acompañó. Y Córdoba, ciudad que lo amó y también lo discutió, fue tema de elogio: “Creo que me he ganado un lugar en el respeto del pueblo cordobés”, reconoció, con emoción sincera.

Aquel diálogo entre Rony Vargas y Charly García es hoy una pieza de archivo invaluable: una conversación sin artificios, donde el mito bajó a tierra para hablar del arte, de la locura y de la necesidad de seguir adelante.

“Si me gustan las canciones de amor y me gustan esos raros peinados nuevos, ya no quiero criticar, solo quiero ser un enfermero”, cantaba Charly. Y en esa frase, acaso, está todo: el genio, la fragilidad, el hombre detrás del mito.

Entrevista de Rony Vargas.

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