Trump advierte a manifestantes: enfrentaran "gran fuerza" en desfile militar de Washington

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, advirtió a los manifestantes que deberán mantenerse alejados del desfile militar programado para el sábado en Washington, DC, con motivo del 250° aniversario del ejército. En su declaración, aseguró que cualquier persona que "odie a nuestro país" se enfrentará a "una gran fuerza". Estas palabras fueron pronunciadas durante una visita a Fort Bragg, Carolina del Norte, donde participó en un evento vinculado a dicha celebración, que coincide con su cumpleaños número 79.

Trump presenció demostraciones por parte del ejército estadounidense, que incluyeron un ataque con misil, una incursión con helicóptero y un asalto a un edificio, todo en el marco de los festejos por el 250° aniversario de esta rama de las fuerzas armadas. Este cuartel se encuentra cerca de Fayetteville y sirve como el cuartel general del Comando de Operaciones Especiales del Ejército de Estados Unidos.

Los comentarios del presidente, emitidos desde la Oficina Oval antes de su partida a Carolina del Norte, advirtieron que los manifestantes congregados durante el desfile militar experimentarían "una gran fuerza", un aviso que no reconoce la diferencia entre manifestaciones pacíficas y enfrentamientos violentos, según indicó The New York Times.

Trump se mostró entusiasta acerca del evento al mencionar que sería un "fantástico día" y reafirmó que los manifestantes recibirían un trato enérgico. "Para aquellos que deseen protestar, se enfrentarán a una gran fuerza. Y no he escuchado nada acerca de protestas, pero saben, esas son personas que odian a nuestro país, pero enfrentarán una gran fuerza", dijo.

Los comentarios se produjeron después de que el presidente alabó la actuación de su administración al desplegar la Guardia Nacional y los marines en respuesta a las protestas que estallaron durante el fin de semana en Los Ángeles, en contra de las redadas federales sobre inmigrantes.

Las tensiones se intensificaron en California, donde se registraron incidentes de violencia, que incluyeron vehículos incendiados, piedras arrojadas a oficiales y saqueos, como el de una tienda de Apple. Sin embargo, los partidarios de las protestas han afirmado que estas se han desarrollado mayormente de manera pacífica y que cualquier episodio violento ha sido exagerado por los aliados de Trump y su administración.

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