La pareja que transformó un hobby en una destilería boutique
Lo que empezó como un pasatiempo entre amigos se convirtió en una fábrica de gin que recibe premios internacionales.
10/11/2025 | 19:07Redacción Cadena 3
FOTO: La pareja que transformó un hobby en una destilería boutique
En Alta Gracia, Córdoba, una idea nacida entre amigos se transformó en un emprendimiento que hoy recibe reconocimientos nacionales e internacionales. Mauro Torres y Valentina Ramos comenzaron haciendo gin para tomar y compartir con amigos, y sin imaginarlo dieron origen a Gin Colibrí, una destilería boutique que crece al ritmo del entusiasmo y la calidad artesanal.
“Arrancamos haciendo un curso, probando recetas, algunas salían bien y otras no tanto. Hasta que encontramos una que nos encantó, y empezamos a compartirla con amigos”, cuenta Mauro en diálogo con La Argentina Posible, por Cadena 3. De ese círculo cercano surgieron los primeros pedidos: “Un amigo quería llevarle a otro, y así comenzó todo”.
Lo que empezó como un pasatiempo pronto se convirtió en una pequeña producción que hoy alcanza los 400 litros semanales. Desde su planta en Alta Gracia, Gin Colibrí se define como una destilería boutique, donde se ofrecen visitas guiadas, catas y experiencias sensoriales. “Nos gusta pensar que Colibrí es más que una bebida: es una experiencia de aromas y sabores”, resume su creador.
La marca cordobesa participó en competencias internacionales, obteniendo medallas de oro y gran oro entre 2023 y 2024, y fue reconocida por CAME y Fedecom con el Premio Comercio Joven del Interior. Además, enviaron muestras a Chile, donde también recibieron distinciones.
“Nos llena de orgullo competir con grandes marcas y demostrar que desde una escala pequeña, respetando los procesos y la calidad, se puede llegar lejos”, afirma Torres.
/Inicio Código Embebido/
De un galpón al mundo. De Justiniano Posse a 35 países: la fábrica argentina que le ganó a los chinos
En pleno 2001, Fabio Moriconi fundó su empresa Apolo donde fabrican balines para armas de aire comprimido. Empezó en un galpón y hoy exporta con tecnología de punta a los cinco continentes.
/Fin Código Embebido/
El crecimiento también llegó de la mano del público: comenzaron vendiendo en ferias gastronómicas y festivales, donde los visitantes probaban un trago y luego compraban botellas. Hoy ya tienen presencia en vinotecas y mayoristas y sueñan con que Gin Colibrí llegue a cada rincón del país.
“De hacer dos litros para nosotros pasamos a una planta con cientos de litros semanales. A veces nos sentamos con Vale y decimos: mirá todo lo que crecimos”, reflexiona Mauro.
Entrevista de Fernando Genesir
