Los fondos de los damnificados por la presunta estafa piramidal de RainbowEX en San Pedro no podrán ser retirados como prometió, que señaló a través de un comunicado en Telegram que "Debido a las restricciones integrales del gobierno argentino, las cuentas relevantes en Sudamérica no pueden acceder con normalidad temporalmente".
En este sentido, sostuvieron que se encuentran "negociando activamente el gobierno argentino", a la vez que "puede llevar algún tiempo restablecer el acceso". RainbowEX aconsejó a los usuarios "mantener la calma y esperar pacientemente el progreso de la plataforma y la restauración del acceso", y negaron que "los miembros de otras regiones se vean afectados. Podrán usar las diversas herramientas de la plataforma con normalidad".
Además, subrayaron que "cada aportante que haya activado su cuenta deberá seguir las instrucciones" de la compañía, al tiempo que se mostraron confiados en poder resolver la problemática lo antes posible. "El consorcio Knight seguirá de cerca el progreso del incidente y le brindará todo su apoyo", concluyó.
La empresa, también conocida como Knight Consortium, advirtió el viernes pasado que se extendía el plazo hasta este domingo para que los inversores paguen los 88 dólares y puedan activar sus cuentas. No le pagaron a nadie de los que pusieron los 88 dólares.
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¿Por qué 88 dólares? Porque el ocho en la numeración china es la abundancia y la felicidad. Es decir, los estafadores aprovecharon este simbolismo y les dijeron a las víctimas que, para recuperar su inversión, deben depositar otros 88 dólares. Se estima que, con la última estafa, la empresa recaudó unos 300.000 dólares extra.
Los inversores, atraídos por la promesa de una ganancia diaria del 1% y 2% en moneda estadounidense, confiaron sus ahorros a una supuesta asesora china, que en realidad era una actriz de Indonesia.
Carlos Rodríguez es un empleado municipal de San Pedro y una de las víctimas de esta estafa. Él había decidido invertir en la plataforma tras escuchar sobre los éxitos de otros, pese a que era reacio a este tipo de inversiones al recordar la crisis del 2001 y cómo los bancos privados le "comieron" los ahorros a mucha gente con el corralito impuesto por Domingo Cavallo.
Consultado sobre cuánto dinero perdió, Carlos respondió que eran casi todos sus ahorros. Dijo a Cadena 3 que su intención era usar el dinero para hacer mejoras en su casa antes de jubilarse. "Me duele más eso, más allá del monto", señaló, refiriéndose a la traición de la confianza depositada en la plataforma.
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"Yo realmente confié porque mi objetivo era sano, entonces también pensé que eso iba a ser sano, que más allá de lo que hablaban, que se hablaba mal de la pirámide, que era una estafa Ponzi. Confié, como algunos en mi familia confiaron", añadió. Carlos también contó que el interés le daba una ganancia que alcanzaba entre 80 y 100 dólares diarios. "Tenía cierta desconfianza, pero me jugué. Es casi un sueldo mío".
Hasta el momento, la causa tiene dos imputados: Luis Pardo y Lucas Liberatti, sospechosos de estar al frente del esquema de RainbowEX. A ambos se los observó esposados mientras los trasladaban a una dependencia de la Policía Federal para captar sus huellas digitales, pero sin pedido de captura en su contra.
La orden vino del fiscal federal Matías Di Lello, quien los imputó por el delito de intermediación financiera ilegal. Pardo es empleado de la empresa Papel Prensa y fue señalado por varias personas como el responsable local de la estafa piramidal.
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"Luis Pardo fue hijastro en su momento del actual intendente de San Pedro, pero no creo que haya una vinculación política detrás. Conozco bien al intendente, me enteré por los medios que ese señor que nombraron era hijastro de él", contó Carlos a Cadena 3, quien está a pocos meses de jubilarse. "Soy un aportante del Estado, de los 18 años que empecé a trabajar y hoy hace 20 años soy empleado municipal en un área importantísima y toda mi vida trabajé, tengo 66 años y tuve 3 trabajos en mi vida, aporto desde los 18 años", señaló.
Por último, Carlos volvió a lamentar lo sucedido y expresó su deseo para que la Justicia actúe y encuentre a los responsables de las estafas. "Hablo y doy la cara porque estuve ahí, confié como muchísima gente y pasó esto. No tengo por qué ocultar nada, creía que esto iba a andar bien a mí me duele mucho eso".
"La confianza a veces mata al hombre, pero ya está, seguiremos adelante. Yo confío en la Justicia, ojalá puedan hacer algo", concluyó.
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Entrevista de Rodolfo Barili y Juan Federico.
