Una jueza federal impide el veto de Trump a estudiantes internacionales de Harvard

Una jueza de distrito en Estados Unidos, Allison Burroughs, tomó la decisión de bloquear temporalmente la prohibición de visados impuesta por el presidente Donald Trump a los estudiantes extranjeros de Harvard. La orden, emitida el jueves, impide que se implemente, mantenga o haga cumplir la Proclamación Presidencial promulgada por Trump el miércoles pasado.

Con esta medida, se restableció la posibilidad de que los estudiantes internacionales ingresaran al país para asistir a Harvard, hasta que se realice una audiencia programada para el 16 de junio. Burroughs justificó su acción al indicar que se buscaba “preservar el statu quo en espera de una audiencia”, tras considerar que Harvard había demostrado que la prohibición causaría un daño inmediato y irreparable.

La proclamación de Trump fue emitida en respuesta a un intento del Departamento de Seguridad Nacional de limitar la capacidad de la universidad para recibir estudiantes extranjeros, revocando su certificación en el Programa de Estudiantes y Visitantes de Intercambio, medida que Burroughs también bloqueó temporalmente.

Además, la jueza anunció que la orden de restricción temporal otorgada a Harvard el 23 de mayo se extendería hasta el 20 de junio o hasta que se pueda dictar una orden judicial preliminar.

Harvard, por su parte, presentó el jueves una impugnación legal ante un tribunal federal contra la prohibición impuesta por la administración Trump, que impedía a los estudiantes internacionales ingresar a Estados Unidos con las visas necesarias para asistir a sus clases.

La decisión de Burroughs se produjo menos de 24 horas después de que Trump anunciara la proclamación y fue considerada por la universidad como un intento de eludir una orden judicial anterior que había bloqueado al Departamento de Seguridad Nacional de prohibir la inscripción de estudiantes internacionales en Harvard.

La universidad argumentó que “las acciones del presidente no se han emprendido para proteger los 'intereses de Estados Unidos', sino para perseguir una venganza gubernamental contra Harvard”, según un informe de la agencia de noticias Xinhua.

El presidente de Harvard, Alan M. Garber, emitió un comunicado poco después de la demanda, señalando que marcar a la universidad por su matrícula de estudiantes internacionales y su colaboración con instituciones educativas de todo el mundo constituye “otra medida ilegal adoptada por la administración para tomar represalias contra Harvard”.

Garber también indicó que la universidad estaba desarrollando “planes de contingencia” para asegurar que estudiantes y académicos internacionales pudieran continuar su labor en Harvard durante el verano y el próximo año académico.

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