El fútbol argentino siempre saca un goleador entre las piedras, el último fue Julián Álvarez que ya está vendido al Manchester City y dejará un vacío difícil de llenar en lo inmediato, especialmente para River.
Julián Álvarez fue el máximo goleador de la última liga que ganó el equipo de Gallardo y está jugando sus últimos partidos en el país. El Araña tiene apenas 22 años y un futuro enorme por delante, incluyendo la posibilidad más que concreta de estar en el Mundial de Qatar.
El mejor resumen de lo que ocurre en el ámbito local es la tabla de goleadores del campeonato pasado: detrás de Julián terminaron José Sand y Marco Ruben. Pepe Sand está tirando sus últimos cartuchos y Ruben ya le puso punto final a su carrera.
Otro detalle muy descriptivo del fútbol argentino es que Matías Tissera, el cuarto máximo anotador de la Liga 2021, ya no juega en el país porque fue vendido a Bulgaria por 1 millón de dólares después de haber convertido 14 goles.
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Pero el éxodo de los goleadores precoces no termina ahí, en el actual mercado se fue José Manuel López, una de las grandes apariciones de los últimos años. El correntino pasó de Lanús a Palmeiras por 7 millones de dólares.
La historia se repite: todo futbolista joven que tiene una buena temporada en el fútbol argentino rápidamente empieza a girar en los mercados. Diego Valoyes parece ser el próximo en la lista. El colombiano, según Fassi, es el mejor delantero del país detrás de Julián Álvarez.
Diego Luis Valoyes tuvo un gran 2021, hizo 11 goles, dio 8 asistencias y fue una de las piezas más importantes del Talleres que terminó tercero en el campeonato y segundo en la Copa Argentina. Valoyes vale, por lo menos, 10 millones de dólares según la dirigencia albiazul.
El colombiano Valoyes, después de dos años flojos en Talleres, mostró todo su potencial en plena pandemia y su nombre apareció como opción para reforzar nada menos que a River y Boca, aunque lo más probable es que su próximo paso sea salir al exterior.
Diego Valoyes todavía se está recuperando de la segunda lesión que sufrió en lo que va del año y lleva más de dos meses sin jugar. Talleres sufre la ausencia del colombiano, perdió una opción de ataque y eso se nota en los números de un equipo que no llega al gol de promedio por partido.
El portugués Caixinha tiene muchas variantes entre los volantes ofensivos con Godoy, Esquivel, Favio Álvarez, Pizzini, pero no le sobran delanteros netos. Después de la lesión de Santos solamente quedan disponibles Girotti y el pibe Romero.
Lejos del resto, en sus propias galaxias, están River y Boca que tienen los dos mejores planteles del país. Gallardo disfruta de los últimos partidos de Álvarez, contrató a Borja, recuperó al lesionado Matías Suárez, repescó a Beltrán y tiene a Romero.
Como si todo eso no fuera suficiente, River coquetea con la posibilidad de sumar a Luis Suárez. La llegada del uruguayo sería un bombazo histórico. Hubo mucho humo desde que salió el rumor, pero también datos concretos: el propio Gallardo le puso palabras a la ilusión de los hinchas.
En la otra vereda, Boca también tiene bien cubiertos los puestos de ataque: Villa, Benedetto y Zeballos es el tridente titular con Vázquez, Orsini y Langoni como alternativas. También es cierto que tras la salida de Salvio le quedó una pata floja.
Dependiendo del esquema que elija, Bataglia cuenta con variantes ofensivas. Tiene dos nueves tradicionales como Benedetto y Vázquez, más un extremo con velocidad, goles y asistencias como Villa, que es uno de los jugadores más determinantes del futbol doméstico.
El Racing de Gago es un equipo que gira alrededor de los volantes ofensivos como Vecchio, Miranda, Moreno y Chancalay, todos llegan al área y tienen gol, pero la referencia del ataque es Enzo Copetti, uno de los mejores puntas del país.
Las ilusiones de Independiente están atadas con alambre, todo le cuesta el doble al Rojo, pero encontró en Leandro Benegas a un delantero con experiencia, recorrido y goles. El mendocino hizo 3 de los 6 tantos del equipo en el torneo y abre una puerta de esperanza para los hinchas.
Uno de los mejores delanteros del fútbol argentino es Ramón Darío Ábila, aún con sus lesiones, sus reiterados fueras de juego y sus altibajos, Wanchope sería titular en cualquiera de los 28 equipos del campeonato.
A Colón no le sobran las cartas, tiene tres opciones ofensivas muy claras: WanchopeÁbila más Farías y circunstancialmente el Pulga Rodríguez. Falcioni no suele ponerlos juntos desde el arranque, pero cualquiera de las combinaciones entre ellos es una amenaza para los rivales.
Otro que tiene lo justo, pero le alcanza es Estudiantes. Con la vuelta de Boselli ganó jerarquía y goles, conservó al Loco Díaz, sumó a Pellegrino como alternativa e incorporó a Benjamín Rollheiser, un jugador al que Zielinski puede sacarle mucho rédito.
El que anda con lo puesto es San Lorenzo. Inmerso es una crisis política, institucional y económica, el Ciclón atraviesa un momento deportivo en el que no le queda otra más que prenderle velas a Bareiro, Blandi, el pibe Leguizamón y el Perrito Barrios.
La rueda del fútbol argentino se sigue moviendo a pesar de un contexto adverso: no ayuda el campeonato masivo, no ayuda la economía del país, no ayuda la inoperancia de los dirigentes, no ayuda la salida temprana de los jóvenes talentos, pero siguen saliendo buenos delanteros.
Por Mauricio Coccolo. Edición: Erika Andújar.
