¡El agua da vida! Su importancia en el embarazo y lactancia

El agua cumple un rol fundamental tanto en el embarazo como en la lactancia. ¡Es tan importante que un 90% de la leche materna está compuesta por agua! Por este motivo, las futuras mamás necesitan aumentar el aporte hídrico desde el embarazo, tanto para hacer frente a las nuevas necesidades de su cuerpo como para lograr una hidratación adecuada.

Agua antes, durante y después de los nueve meses

Además de hidratar a la mamá y a su bebé, trae numerosos beneficios:

● Ayuda a realizar una correcta digestión de alimentos.
● Permite eliminar las toxinas del organismo.
● Reduce la retención de líquidos en zonas como las manos o tobillos.
● Mejora la calidad del líquido amniótico, protegiendo la vida del bebé.
● Reduce la posibilidad de hemorroides o estreñimiento.
● Previene partos prematuros.
● Elimina el sodio y purifica el cuerpo evitando posibles infecciones en el tracto urinario o la vejiga.

¿Qué cantidad de agua hay que tomar?

Se recomienda que durante el embarazo y la lactancia, el aporte de agua sea de más de dos litros y medio por día, es decir, que haya un aumento de por lo menos 500 ml. de agua respecto al consumo habitual.

Un vínculo para toda la vida

Desde la gestación, durante la lactancia y continuando a lo largo de toda la vida. El Agua está en cada rincón de nuestro cuerpo porque da energía, da fuerza y sobre todo: El Agua da vida. ¡Que disfrutes este momento tan especial rodeada de amor: Feliz día de la madre! El Agua nos une, el futuro también.

Epígrafes:
Durante los primeros seis meses de vida, La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda alimentar a los bebés con leche materna ya que con ella se nutren e hidratan.

(Aguas Cordobesas)

A una correcta hidratación es importante sumarle una alimentación sana y completa que contenga alimentos como frutas y verduras. (Aguas Cordobesas)

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