Greenpeace burló la seguridad de la Central de Embalse

A dos años del desastre atómico de Fukushima, 40 activistas de Greenpeace ingresaron ayer a la Central Nuclear Embalse para exigir que Argentina abandone el peligro de la energía nuclear.

Luego de vulnerar de manera pacífica las medidas de seguridad de la usina atómica, los activistas se dirigieron al edificio del reactor para desplegar la leyenda "Basta de peligro nuclear".

La jefa de División Relaciones Públicas en la Central, Patricia Jaeggi dijo a Cadena 3 que los activistas entraron sin autorización y se dirigieron al reactor.

"No entraron a ningún edificio interno y el funcionamiento de la planta no se vio afectado", sostuvo.

"Ingresaron por una puerta principal y de alguna manera entraron y fueron acompañados por Gendarmería", completó.

"Esta acción de Greenpeace demuestra que la seguridad de la Central Nuclear Embalse, como la de todo reactor nuclear, es vulnerable a cualquier imprevisto. Es urgente el cierre de esta Central, que está ubicada sobre una falla sísmica y tiene su vida útil vencida, e iniciar así el abandono de la energía atómica en el país", declaró Mauro Fernández, coordinador de la Campaña de Energía de Greenpeace en Argentina.

Fernández dijo a Cadena 3 que los manifestantes ingresaron "en forma pacífica, flameando banderas y con mamelucos naranjas".

"En el reactor hicieron una escalada y desplegaron la bandera", dijo.

Sobre los detalles de cómo entraron a la central nuclear, Fernández contestó: "Por la puerta, que estaba abierta".

Informe de Fernando Genesir .

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