Fuerte conflicto en Juntos por el Cambio por la intención de sumar a Schiaretti

Una fuerte crisis se desató este viernes por la noche en una reunión de la mesa nacional de Juntos por el Cambio en la Casa de Jujuy, a diez días del cierre de alianzas electorales.

La intención de Horacio Rodríguez Larreta y Gerardo Morales, con el aval de Elisa Carrió (Coalición Cívica) y Miguel Ángel Pichetto, era incorporar al espacio al gobernador de Córdoba Juan Schiaretti.

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La propuesta generó un fuerte rechazo del sector de PRO que responde a Patricia Bullrich y Mauricio Macri. El conflicto repercute en Córdoba, donde Luis Juez anhela desbancar al peronismo en las elecciones del 25 de junio próximo.

“No nos podemos convertir en una secta y achicarnos cada día más. Nos tenemos que ampliar. Les pido a los que están subidos a la agresión que bajen un cambio”, dijo Gerardo Morales a La Nación.

"No entreguemos a Luis Juez y los cordobeses" 

En diálogo con Radio Rivadavia, Bullrich señaló: "Me parece que lo de Schiaretti está muy tirado de los pelos, inventada por los que tienen miedo de perder las PASO".

La dirigente del PRO señaló que Juntos por el Cambio quiere ganar Córdoba, "las elecciones son el 25 de junio y el 24 ¿Queremos meter a nuestro competidor?".

Además, recordó que los legisladores del peronismo cordobés respaldaron la mayoría de las leyes que presentó el kirchnerismo en los últimos años, entre ellas, la última moratoria previsional.

Bullrich reveló que se enteró de la iniciativa de incluir al gobernador de Córdoba "por los diarios" y lo adjudicó a maniobras de la propia interna del PRO.

"Los que quieren representar un popurrí no les va a resultar fácil que eso sea Juntos por el Cambio", afirmó la candidata quien acusó a sus oponentes en la interna de hablar "primero con los diarios y después se quiere discutir adentro".

"No entreguemos a Luis Juez y los cordobeses" afirmó la precandidata, quien sostuvo que Juntos por el Cambio "no representa esa línea en la que siempre (Sergio) Massa aparece en el medio".

Por su parte, el radicalismo cordobés emitió un contundente comunicado:

La Unión Cívica Radical de Córdoba ratifica su posición mantenida desde hace 23 años, de opositor al modelo de gobierno del peronismo cordobés y lo que representa este para la sociedad cordobesa.

Los dirigentes del radicalismo no podemos desconocer que cuando se plantea incorporar al gobernador de Córdoba a la coalición, se está discutiendo la incorporación de un modelo no sólo de una persona que lo representa) de aparente equilibrio asentado sobre la pauperización de los ingresos de los docentes, de los trabajadores de la salud y el constante deterioro de los ingresos de sus jubilados. Así también representa un sistema que, en el largo ejercicio del poder ha deteriorado sus instituciones en una regresión que pone a Córdoba entre las provincias feudales. Como en todo sistema feudal, cada vez es más difícil hacer oír una voz diferenciada.

Córdoba, que es la provincia de la Argentina que aporta un porcentual de ocho puntos al producto bruto del país, sin embargo, muestra niveles de pobreza superiores al resto de las provincias, lo que también ocurre con los niveles de desocupación laboral.

Hoy Córdoba es una provincia en la que pocos ganan mucho y muchos ganan, pocos y muchos más no ganan nada.

Schiaretti es el más cabal representante de este modelo en el que cunde la inseguridad y la violencia institucional que, cada tanto, se cobra la vida de inocentes.

El gobernador de Córdoba no tiene ninguna chance de convertirse en gobernante nacional, por lo que denunciamos la estrategia vernácula que, ante la fuerte posibilidad de perder el poder en las próximas elecciones en esta provincia, ensaya una alquimia para vender afuera solo para que le retribuya electoralmente en Córdoba.

Exhortamos a los dirigentes nacionales a no comprar el humo que se les intenta vender.

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