Delio Onnis: “En Francia hay un antes y un después de Messi”

La llegada de Lionel Messi al Paris Saint-Germain desató un furor inusitado por el fútbol francés y el descubrimiento de muchos datos que involucran a otros argentinos. Uno de ellos es Delio Onnis, máximo goleador histórico de la Ligue 1, quien dialogó con La Central Deportiva (Cadena 3 Santa Fe Fm 101.7).

"Sin haber jugado, Messi ya marcó un antes y un después para la liga de Francia. Son los campeones del mundo y además tienen a Mbappé y a Neymar en su liga. Messi era el pompón que les faltaba", manifestó. Incluso se animó a decir que, en la actualidad, la francesa es una de las dos mejores ligas del mundo.

Onnis nació en Giuliano di Roma, Italia, pero se crió en Argentina. “Cuando tenía dos años, mis padres emigraron a Argentina después de la guerra”, explicó. Desde pequeño jugó en potreros de la ciudad de Caseros hasta que debutó en 1966 con la camiseta de Almagro. Dos años en el Tricolor alcanzaron para que un equipo de Primera como Gimnasia y Esgrima La Plata pusiera la mirada en él.

En el "Tripero" fue el goleador de aquel equipo conocido como “La Barredora”. El trampolín para llegar a Europa. "Con la plata de mi venta a Stade de Reims, Gimnasia terminó de pagar el predio de Estancia Chica", reveló.

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El "Tano" llegó al fútbol francés en 1971 y se mantendría quince temporadas en la Ligue 1. Vistió los colores de Stade de Reims, Mónaco, Tours FC y Toulon. Anotó 299 goles, cifra imbatible hasta el día de hoy, que le vale el apodo puesto por el diario deportivo Marca: “El ADN del gol”.

En todo ese tiempo, fue muy atractiva su rivalidad deportiva con Carlos Bianchi, con quien fue mantiene una muy buena relación."En una década, Carlos fue cinco veces goleador del torneo y en las otras cinco fui yo. Michel Platini no pudo ser goleador y nos decía ustedes los argentinos me arruinaron", expresó entre risas.

Sin embargo, la llegada del ítalo-argentino a la liga de Francia fue casi por casualidad. "Stade de Reims ascendió y no le ganaba a nadie. Entonces vino a buscar un delantero a Argentina, que era Alfredo “Mono” Obberti, pero su esposa no quiso viajar al exterior. El pase no se hizo y me llevaron a mí", contó.

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La impresionante cantidad de goles aún lo mantiene entre los principales artilleros de la historia. Según la Federación Internacional de Historia y Estadística de Fútbol, Onnis se encuentra en la posición Nº 72 de los mejores goleadores de todos los tiempos. Entre los argentinos que están en esa tabla sólo lo superan Messi, Alfredo Di Stéfano, Mario Kempes, Diego Maradona, Sergio Agüero y Carlos Bianchi. Por debajo de él hay íconos como Gabriel Batistuta, Gonzalo Higuaín o Ángel Labruna. Si se toma el dato del promedio de gol (0,61 por partido) su ubicación sube al puesto 52 de los mejores anotadores del mundo.

Si bien su camino en el fútbol galo se inició en el Stade de Reims (donde el presidente del club y dueño de un viñedo le regalaba semanalmente una caja del champán más caro), su figura está fuertemente identificada con el Mónaco, equipo con el que logró sus únicos dos títulos: La liga 77-78 y la Copa de Francia de 1980.

Ya retirado del fútbol, Onnis siguió vinculado al club monegasco por mucho tiempo como ojeador de futbolistas en Argentina. Sin ponerse colorado sostuvo que fue él quien le recomendó al equipo del principado fichar a Marcelo Gallardo. “Por suerte me hicieron caso”, dijo. Ahora, con la misma seguridad, se anima a vaticinar que “por lo que hizo como jugador en Francia y por lo que está realizando como DT en River”, el Muñeco será entrenador del Mónaco en el futuro.