La China Suárez y Rusherking, noche de amor y de a pie
La actriz y el cantante estuvieron juntos en la zona de Recoleta y al salir se dieron con que la grúa les había llevado los autos. Mirá el video.
25/05/2022 | 06:16Redacción Cadena 3
Eugenia La China Suárez y Thomas Nicolás Tobar, el rapero conocido como Rusherking pasaron la noche en un hotel en la zona de Recoleta y un testigo privilegiado fue el notero Alejandro Castelo, que hizo guardia en la puerta del hotel que les dejó una desagradable sorpresa a la salida.
En Los Ángeles de la Mañana hizo guardia buscando imágenes de los novios, que disfrutaban su intimidad puertas adentro del establecimiento. Pero afuera también pasaban cosas interesantes: a las 8, una grúa se llevó el auto de la actriz y luego el del cantante, que estaban mal estacionados sobre la avenida Callao.
/Inicio Código Embebido//Fin Código Embebido/
Fue el propio notero, todavía en pijama tras la guardia, el que les pidió el taxi para que vayan a buscarlos al playón de acarreo, nueve horas después del paso de la grúa.
“¡Muchas felicidades para los dos!”, les dijo el cronista a ambos, mientras el cantante se agarraba la cabeza por tener que ir a buscar su auto acarreado.
“La grúa se llevó el auto, chicos. Solamente les quería dar mis felicitaciones”, agregó Castelo, mientras le recordaba a la China que se amigó con Ángel en la fiesta que organizaron los famosos después de la entrega de los premios Martín Fierro.
/Inicio Código Embebido/
Mirá también
/Fin Código Embebido/
Según contó el cronista, la pareja cenó en un restaurante y luego se dirigieron al hotel, del que recién salieron pasado el mediodía.
Sin emitir opiniones al respecto y apenas con unos saludos de cortesía, la actriz y el cantante cruzaron la avenida y se dispusieron a parar un taxi. Luego de un par intentos en vano, el trapero logró encontrar una unidad libre y se abalanzó sobre el vehículo. Subió él primero y atrás lo hizo la China, que se despidió del cronista con un “buen día” y le advirtió que iba a cerrar la puerta, en las únicas palabras que captó el micrófono.