Ofrecen 42 euros de recompensa por cada uno de los 27 mil salmones en fuga
Los peces escaparon al romperse las redes de una factoría noruega. Además del perjuicio económico, temen por el impacto ambiental.
13/02/2025 | 13:50Redacción Cadena 3
La fuga de 27.000 salmones de una piscifactoría en Noruega desató una ola de preocupación ambiental y económica.
Este incidente, ocurrido en las instalaciones de Mowi, el mayor productor mundial de salmón de piscifactoría, se produjo tras un daño estructural en el recinto acuático debido a una tormenta.
La empresa ofreció una recompensa de 500 coronas noruegas (aproximadamente 42 euros) por cada salmón recuperado, lo que equivale a un total potencial de 1.242.000 euros si se logran capturar todos los ejemplares fugados.
Impacto ambiental
Los efectos ambientales de esta fuga son alarmantes. Activistas y expertos advierten que la introducción de salmones de piscifactoría en ecosistemas naturales puede reducir la diversidad genética del salmón salvaje y aumentar la propagación de enfermedades, como el piojo de mar, que afecta gravemente a las poblaciones autóctonas.
Pål Mugaas, portavoz de Norwegian Salmon Rivers, enfatizó que el cruce entre salmones salvajes y los escapados podría resultar en crías con baja tasa de supervivencia.
Respuesta Institucional
La Dirección General de Pesca noruega permitieó a Mowi realizar operaciones de recaptura más allá del límite habitual de 500 metros alrededor del incidente.
Esto refleja la gravedad del problema y la necesidad urgente de mitigar el impacto.
Sin embargo, el ministro noruego de Medio Ambiente, Andreas Bjelland Eriksen, rechazó la prohibición total de las piscifactorías con redes abiertas, optando por buscar un "nivel aceptable de contaminación" para las especies salvajes.
Noruega es un importante exportador global de salmón, con una producción anual que alcanza las 1.2 millones de toneladas.
La fuga representa no solo un desafío ambiental sino también una significativa pérdida económica para Mowi, estimada en más de 1.8 millones de dólares si no se logra recuperar a los peces5.
El evento ha suscitado críticas entre políticos y defensores del medio ambiente, quienes exigen regulaciones más estrictas para prevenir futuros incidentes.
La situación actual es vista como una oportunidad para replantear las prácticas en acuicultura, con alternativas más sostenibles que minimicen el riesgo de fugas y protejan los ecosistemas marinos.