El búnker de Deodoro Roca
05/07/2021 | 18:08Redacción Cadena 3
Algo tienen en común Ortega y Gasset, Pablo Neruda, Hermann Graf Keyserling, Rafael Alberti, Juan Filloy, José Ingenieros, Lisandro de la Torre, Alfredo Palacios, Manuel Gálvez, Eugenio d’Ors y Macedonio Fernández.
Todos ellos pasaron alguna vez por el sótano de Deodoro Roca, el sitio elegido por esta importante figura cordobesa del siglo XX para sus tertulias intelectuales. Deodoro Roca, dirigente universitario, abogado, periodista y hasta candidato a intendente en 1932, fue especialmente reconocido por su rol de ideólogo y líder de la Reforma Universitaria de 1918, para la cual redactó el Manifiesto Liminar.
Su vivienda, en calle Rivera Indarte 544, fue testigo de cada etapa de su vida: lo vio nacer el 2 de julio de 1890, fue sede de sus interminables tertulias, y lecho de su muerte, el 7 de junio de 1942, a los 51 años. Un improbable mito urbano cuenta que la casona contaba con un túnel por el cual el padre de Deodoro se escapaba hacia el río Suquía en épocas de revueltas. Lo que sí fue probado por diversos actores sociales fue la existencia de esa especie de búnker al servicio de la intelectualidad de la época.
El progreso redujo la casa a escombros y en su lugar hoy se levanta una concesionaria de motos. El sótano habría sobrevivido a la demolición.
En la vereda hoy una solitaria placa evoca lo que fue uno de los centros más importantes de la cultura argentina en las décadas del 20 y del 30 del siglo pasado: "2 de julio. 1890 - 1990. Aquí vivió Deodoro Roca. Maestro de la juventud. En el centenario de su nacimiento, homenaje del Partido Socialista Popular", reza.