De un ovillo de lana a crear una marca argentina de trajes de baño

1. Audio. De un ovillo de lana a una marca nacional de bikinis con impronta propia

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Desde Santa Fe, Josefina Borlle encarna el espíritu de una generación de emprendedoras que transforman una pasión en un proyecto sustentable. Lo que empezó como un hobby artesanal se convirtió en Osean, una marca de trajes de baño que hoy tiene identidad, comunidad y alcance nacional.

“Soy mi propia clienta”, dice entre risas Josefina, que habla con la frescura y la claridad de quien conoce a fondo su producto. En su voz se adivina la mezcla de intuición y trabajo que define a las nuevas creadoras argentinas: mujeres jóvenes que construyen empresas desde el deseo, el diseño y la constancia.

El origen: una bikini tejida a mano

“Arranqué hace más de diez años, cuando todavía estudiaba arquitectura”, cuenta. “Compré un ovillo de veinte pesos, me senté a tejer mi primera bikini y me enamoré del proceso. No tenía ni idea de moda, pero me encantaba crear con las manos", comenta.

Ese fue el inicio de su primera marca, que sostuvo durante siete años: “Aprendí todo de prueba y error. Hacía de todo: diseñaba, vendía, respondía mensajes, sacaba fotos. Era un taller, un estudio y una escuela a la vez”. Pero con el paso del tiempo, el entusiasmo inicial se transformó en rutina: “Sentí que había perdido el sentido, que ya no me hacía feliz. Entonces decidí cerrar. Y fue durísimo, porque era mi proyecto, mi nombre, mi todo”.

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Renacer después de la pandemia

El quiebre llegó con la pandemia y el encierro. “La pandemia me cambió la cabeza. Me obligó a parar y pensar qué quería realmente. Y entendí que quería volver a disfrutar lo que hacía, pero desde otro lugar. Así nació Osean”, recuerda.

En 2021, con presupuesto cero y el apoyo de una amiga, hoy su socia, Josefina empezó de nuevo. “Empezamos desde una habitación de mi casa. Teníamos una máquina, telas que habíamos conseguido a precio de remate y muchas ganas. En diez meses, lanzamos nuestra primera colección”, agregó.

El resultado superó cualquier expectativa: “El día que subimos el primer reel, estuvimos 12 horas editando. En una hora ganamos 200 seguidores. En un mes, 10.000. No lo podíamos creer. Fue una locura, pero también una señal de que algo estábamos haciendo bien”.

Crecer sin perder la esencia

Hoy Osean tiene tres oficinas en Santa Fe, seis personas en el equipo y clientas en todo el país. La marca se consolidó no solo por sus diseños, sino por la conexión emocional que logró construir con su comunidad.

“Instagram fue nuestra vidriera y nuestra escuela. No teníamos local, así que todo era digital. Nosotras mostramos todo: el detrás de escena, los errores, los nervios antes de un lanzamiento. Eso genera empatía. Las chicas se sienten parte del proceso”, reflexionó.

El crecimiento también permitió cumplir sueños. En 2024, Osean realizó su primera campaña de verano en Río de Janeiro. “Fue algo simbólico, un premio al esfuerzo. Nos dimos cuenta de que estábamos haciendo las cosas bien, que la marca ya trascendía Santa Fe”, analizó.

Apostar por la producción nacional

No todo fue fácil. Josefina reconoce que el rubro textil presenta desafíos enormes en Argentina. “La parte más difícil es la producción. Conseguir talleres que trabajen bien, respeten tiempos y mantengan calidad es un desafío constante. Te manejan los plazos, los errores, los colores… Hay que tener mucha paciencia”, relató.

A pesar de las dificultades, Osean mantiene una decisión firme: seguir produciendo en el país: “Nos ofrecieron fabricar en China, pero no me interesa. Quiero que la marca siga siendo argentina. Que cada bikini tenga detrás trabajo local, historias reales y manos nuestras”.

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El futuro: una comunidad que crece

Con apenas tres años de vida, Osean ya se prepara para su cuarta temporada: “Este año fue la primera vez que pudimos lanzar con tiempo, en septiembre. Eso muestra cuánto crecimos. Antes todo era caos, ahora hay planificación, equipo y estrategia”.

“A veces pensamos que para empezar algo hay que tener todo resuelto, y no. Yo empecé con una lana y una idea. Lo importante es animarse, sostenerlo y hacerlo con amor. Lo demás llega solo", concluyó.

Entrevista de Facundo Sonatti

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