Sorpresa: jugó en Boca, no prosperó y ahora se dedica a la agricultura en Japón
Nahohiro Takahara, una de las contrataciones más exóticas en la historia de Boca, se alejó del fútbol y ha cambiado radicalmente su vida. Su historia es un reflejo de su adaptación.
30/04/2025 | 13:19Redacción Cadena 3
Durante la época más destacada de la gestión de Mauricio Macri en Boca, se propuso un proyecto que buscaba expandir la marca del club en Asia, aprovechando el éxito del Xeneize en la Copa Intercontinental del 2000 que se celebró en Tokio. Así, llegó Nahohiro Takahara al equipo argentino.
El club anunció en 2001 la llegada de este delantero japonés, quien contaba con un destacado currículum deportivo, sumando logros en la Liga de Japón y en la Copa de Naciones de Asia. En aquel entonces, Takahara tenía 22 años y era un habitual convocado a su selección nacional.
Su experiencia en el club argentino fue efímera, durando apenas seis meses, en los cuales el joven delantero no pudo completar más de diez partidos bajo la dirección de Carlos Bianchi.
“Era un chico bárbaro, con mucha técnica. Tenía unas condiciones muy buenas, pero el Mundo Boca lo superó, entraba a la cancha y se paralizaba”, relató Gustavo Pinto, quien compartió equipo con él en 2001, en entrevista con Infobae.
Más tarde, Takahara continuó su carrera en el Júbilo Iwata, donde ganó el premio MVP de la J-League y se consagró como máximo goleador. Posteriormente, fue transferido a mediados de 2002 al Hamburgo de Alemania, siguiendo su senda en el Eintracht Frankfurt.
Regresó al fútbol asiático en un nuevo capítulo, jugando para el Suwon Samsung Bluewings en Corea del Sur y en varios equipos japoneses como Urawa Red, Shimizu S-Pulse, Tokyo Verdy y SC Sagamihara.
En 2015, se volcó hacia el ámbito empresarial y fundó Okinawa, una compañía dedicada al cultivo de café. “Si logramos que el café crezca adecuadamente en tierras agrícolas abandonadas y lo cosechamos, Okinawa podría convertirse en una región productora de café”, explicó sobre su negocio en su tierra natal.
Además, Takahara estableció un club, el Okinawa Sport-Verein, con sede en Urama, donde fue jugador, entrenador y capitán, logrando ascender hasta la cuarta división del fútbol japonés.
Nahohiro Takahara llevó el célebre número 10 hasta su retiro a los 44 años en 2023, enfocándose plenamente en la agricultura. Curiosamente, la camiseta de su club actual es idéntica a la de Boca, un símbolo de la huella que su paso por Argentina dejó en su vida.
El paso de Takahara por Boca
Takahara vivió la experiencia de vestir la camiseta de Boca durante seis meses en 2001. Su fichaje fue parte de una estrategia del entonces presidente Mauricio Macri para exportar la marca del club en el mercado asiático.
A pesar de su trayectoria en Europa y de haber participado en la Copa del Mundo 2006 en Alemania, “Taka” no pudo adaptarse al fútbol argentino y su paso por el club fue fugaz.
En siete partidos, en su mayoría ingresando desde el banco, el delantero japonés marcó solo un gol, que fue observado con gran alegría por su entrenador Carlos Bianchi, ocurrido ante Lanús en La Bombonera.