Talleres, ante el desafío de ser lo que era lejos de casa

El inconsciente colectivo futbolero decreta, de manera casi inmanente al deporte más popular del país, que un escenario ideal para la mayoría de los equipos se enmarca en cumplir con la llamada “media inglesa”: ganar
los partidos de local y empatar de visitante, para sumar al menos un punto en esa condición y mantenerse en la pelea.

Bajo la dirección técnica de Frank Darío Kudelka, Talleres logró en su última estadía en el ascenso (y en varios pasajes de la máxima categoría) una suerte de “inglesa total” de la que supo disfrutar y presumir. Hoy, sin
embargo, la extraña.

La “T” pudo edificar una envidiable fortaleza fuera de Córdoba tanto en el Federal A, donde ascendió superando a Sol de América de Formosa en octubre de 2015, como en la B Nacional, torneo en el que se coronó campeón invicto. Allí, selló su pase a Primera una tarde de junio de 2016 en la cancha de All Boys, con el mítico gol de Pablo Guiñazú al ángulo en la última jugada del partido. Kudelka, incluso, consiguió el récord de ser el técnico que más partidos ganó de visitante en la historia del club de barrio Jardín.

En el presente torneo, y uniendo el análisis a lo ocurrido en el último tramo de la Superliga pasada, “El Matador” perdió el mote de “cuco” fuera del estadio Kempes: de los últimos 10 encuentros de visitante, sólo ganó uno (2-0 frente a Gimnasia, en La Plata, por la tercera fecha de este campeonato).

De los otros nueve, incluyendo compromisos de la liga anterior, empató tres (1-1 vs San Martín en San Juan, 0-0 vs Tigre y 2-2 vs Olimpo) y perdió seis (1-2 y 0-1 ante Boca, 1-2 frente a Newell’s, 0-3 y 1-2 con Unión y 1-2
contra Patronato).

Sin contar la victoria en “El Bosque”, el 25 de agosto pasado, la última sonrisa del “Albiazul” fuera de la provincia mediterránea en Superliga fue el 5 de febrero de este año (1-0 sobre Temperley, con gol de Junior Arias).

Este viernes, en Florencio Varela y con el envión anímico y futbolístico del inolvidable 3-0 en el clásico, Talleres tendrá la gran oportunidad de comenzar a reencontrarse con esa identidad inexpugnable que supo construir de visitante cuando enfrente, desde las 19, a un duro Defensa y Justicia.

Cuadro de situación

“El Halcón” vuela. Y vuela alto, como nunca antes. Está invicto en el torneo, con 12 puntos, producto de tres triunfos y tres igualdades, y el próximo jueves visitará a Junior de Barranquilla, por la ida de cuartos de
final de la Copa Sudamericana. Goza del mejor momento de sus 83 años de historia. Sin embargo, el conjunto cordobés tiene sus armas para bajarlo.

Una de ellas es el conocimiento. El entrenador Juan Pablo Vojvoda llegó a la “T” desde Defensa y Justicia, donde forjó pocos meses atrás los cimientos del gran presente del equipo “verdeamarelo”. Y se trajo en el bolso a dos pilares de su formación, como Andrés Cubas y Tomás Pochettino. Los tres conocen bien los rincones del Norberto Tomaghello, y eso es un punto a favor.

Por otro lado, el historial en Primera División. Será el tercer partido entre sí en la divisional, y los dos anteriores fueron con sonrisas albiazules: en marzo pasado, Talleres ganó 1-0, con un tanto de Juan Ramírez (Vojvoda estuvo sentado en el banco del “Defe”), y el viernes 21 de octubre de 2016 se impuso por 2-0 (gritaron Jonathan Menéndez y Sebastián Palacios).

En tercer lugar, la actualidad. La goleada sobre Belgrano significó una inyección anímica de incalculable potencia, que le brinda un espaldarazo tanto al DT como al plantel. Esbozos de buen fútbol, la esperada aparición de un jugador que pueda coquetear con la red del rival como Nahuel Bustos, el orden y claridad del inoxidable “Cholo” y un funcionamiento colectivo que de a poco parece aceitarse, más la confianza que acarrea un resultado como el de la fecha pasada, son argumentos sólidos para sostenerla.

Finalmente, los hinchas albiazules podrán estar presentes en Florencio Varela, y por primera vez en el certamen tendrán la chance de alentar desde una tribuna que no es la Willington, ni la Gasparini ni la Ardiles. El apoyo y acompañamiento in situ siempre es un bastión para un atleta.

El orden de los factores no altera el producto. Talleres afrontará una parada brava, pero tiene con qué cortarle las alas al “Halcón”. Cuando la pelota comience a rodar y se abra la Fecha 9, se verá si puede empezar a reconstruir ese romance con la “inglesa total” que hasta no hace mucho tiempo supo conquistar.

Informe de Juan Schulthess.