Alumnos porteños deberán combinar trabajo y estudio

Los alumnos de quinto año de las escuelas porteñas deberán combinar trabajo y estudio, de acuerdo con una reforma en el nivel secundario que impulsa el Gobierno de la Ciudad y que ya genera polémica desde el sector docente.

El proyecto que el Gobierno porteño apunta a implementar a partir de 2018 contempla modificaciones, como reemplazar las notas numéricas de 1 a 10 por un sistema de créditos; eliminar la repitencia completa del año, ya que se recuperarán contenidos; y no habrá materias independientes, sino integradas dentro de áreas de conocimiento.

Uno de los cambios más cuestionados por el sector docente es del de trabajar a la par del estudio durante el último año de clases.

Se trata de un nuevo esquema denominado "Secundario del Futuro", que incluye dos años de ciclo básico, dos años de ciclo orientado y un quinto año que será "integrador y formativo más allá de la escuela".

El vicejefe de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Diego Santilli, marcó en diálogo con Cadena 3 que "hay un cambio profundo de paradigma" en el aprendizaje con la aparición de la tecnología.

"Se trata de ver cómo aprenden nuestros hijos. Trabajamos en cambiar los fondos, tratar de que nuestros chicos puedan potenciar sus sueños, o cambiar la nota por un módulo de crédito que va más hacia los campos de cada uno de los chicos", sostuvo.

"Es ver cómo hacemos prácticas educativas que ayuden a potenciar a los chicos para la salida laboral, para la preparación para la Universidad. Esto no se trata de que hablemos sólo de empresas. Aquellos con perfil artístico, ¿Por qué no el (Teatro) Colón o escuelas de arte?", remarcó.

Los alcances y el desarrollo

La subsecretaria de Coordinación Pedagógica del ministerio de Educación porteño, Andrea Bruzos, explicó a NA que el proyecto se pondrá en práctica a partir de 2018 "en 20 escuelas, en un cronograma de implementación".

Sobre el tema del trabajo y el estudio que los alumnos de quinto año deberán efectuar, precisó que se trata de "prácticas educativas que se realizarán en otro ámbito de la escuela".

"Por ejemplo, una orientación en Economía sí se puede hacer en una empresa, pero si es una orientación en óptica la harán en ópticas o en los hospitales San Lucia y Lagleyze", detalló.

Contrapunto: advierten que "hay que tener cuidado" con ese tipo de reformas

El especialista en educación Gustavo Iaies señaló a Cadena 3 que el proyecto presenta "algunos caminos interesantes", pero advirtió que "hay que escuchar más a la escuela y los docentes" y tener "cuidado con estas reformas que se piensan desde arriba".

"No hay que perder de vista el sentido prioritario. En Argentina la mitad no termina la escuela. Buscamos que aprendan más, los saberes básicos que permiten ingresar al mundo", puntualizó.

En esa línea, añadió: "Tiene algunos caminos interesantes, como los tutores, ir por los créditos, la experiencia del último año de tener más vinculación con el mercado, pero en el resto me da la sensación que se están apurando un poco".

"Creo que hay que escuchar más a la escuela, a los profesores y rectores para ver qué pueden hacer. Hay que tener cuidado con estas reformas que se piensan desde arriba. Hay que escuchar de abajo cómo se puede implementar", cerró.

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