Una docena de países mantiene la prohibición de exhibir "El código Da Vinci"

"El código Da Vinci" protagonizado por Tom Hanks es un film dirigido por Ron Howard que se estrenó en 2006  y que, al margen de las críticas, puede considerarse sumamente exitoso ya que para su producción se invirtieron 125 millones de dólares  y dejó en taquila 760.

Sigue a Robert Langdon (Hanks)  , un profesor experto en símbolos antiguos, que se ve involucrado en el misterioso asesinato de Jacques Sauniére, un empleado del famoso museo Louvre y que escribe el nombre del maestro con sus últimas fuerzas.

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Lo acompañará Sophie, la nieta de Sauniere (Audrey Tautou)  y juntos  se proponen descubrir al verdadero asesino; pero conforme van avanzando en la investigación y descifrando las pistas que el anciano les dejó, advierten  que, en realidad, no están detrás de un hombre sino del Santo Grial, la mágica fuente que forma parte de la mitología cristiana.

Hasta allí nadie podría sospechar que existe una docena de países donde mantienen la prohibición de exhibir la película. La razón es la imágen de Jesús que presenta el film.

Basada en la novela homónima de Dan Brown, la cinta  desató una  fuerte polémica con la Iglesia católica debido a algunas controvertidas interpretaciones de la historia del cristianismo. Tanto fue así que algunos obispos aconsejaron a los católicos no ver la película.

Según Brown, el autor de la novela que inspiró la película,María Mgdalena  era una mujer judía de la tribu de Benjamín, que se casó con Jesús y dio a luz a su hijo. Jesús trató de dejar a la Iglesia en sus manos, esa Iglesia iba a devolver la «deidad femenina» a la vida humana y al conocimiento general. Después de la crucifixión de Jesús, María Magdalena huyó a la comunidad judía de Provenza, donde ella y su hija Sarh hallaron refugio. Su vientre es el «Santo Grial».

Para quienes todavía no la vieron, "El código..." está en Netflix.

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