El Departamento de Estado de EEUU presenta al Congreso su plan de recortes y reorganización
El Departamento de Estado de EEUU notificó al Congreso sobre una importante reorganización que incluye recortes en varios programas y una drástica reducción del 18% en su plantilla en Estados Unidos, afectando a más de 300 oficinas y funciones estratégicas.
29/05/2025 | 16:19Redacción Cadena 3
Reducción del personal y eliminación de oficinas
El 29 de mayo de 2025, el Departamento de Estado de Estados Unidos notificó al Congreso acerca de una reorganización que proponía un drástico recorte del personal, estableciendo una disminución del 18%. Esta iniciativa supera los recortes sugeridos previamente por el secretario de Estado Marco Rubio y establece cambios significativos en su funcionamiento. La carta obtenida por The Associated Press revela que esta reestructuración busca responder a las políticas del presidente Donald Trump para reformar la diplomacia estadounidense y disminuir la burocracia del gobierno federal.
Además, se planificó la eliminación de una serie de divisiones que supervisan la actividad de Estados Unidos en Afganistán, incluidos los esfuerzos de reasentamiento para afganos que colaboraron con el ejército estadounidense. La gestión también se centra en encontrar un nuevo enfoque para las funciones que solía desempeñar la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, que ha sido eliminada durante esta administración.
Cierre de divisiones y programas críticos
La propuesta de reorganización incluye la eliminación de diversas unidades que, según el Departamento de Estado, realizan tareas poco claras o redundantes. En su carta, se indica que "una diplomacia moderna y efectiva requiere simplificar esta burocracia inflada". Este ajuste afectará a más de 300 oficinas y dependencias, generando una fuerte reacción por parte de grupos defensores de los derechos de los veteranos y programas de reubicación.
Los críticos de este plan denunciaron que los recortes se orientan ideológicamente hacia una agenda que prioriza temas de seguridad fronteriza, dejando de lado cuestiones relacionadas con derechos humanos y diversidad. Shawn VanDiver, un veterano de la Marina y director de una organización de apoyo a refugiados afganos, describió esta situación como un "desmantelamiento deliberado" de los esfuerzos por ayudar a quienes colaboraron con Estados Unidos en Afganistán.
Reacciones y consecuencias esperadas
Los retrocesos propuestos generaron preocupaciones en varios sectores, alertando sobre el impacto que esto tendría en las comunidades afganas que dependen de la asistencia del gobierno estadounidense para su reasentamiento. El Coordinador de Esfuerzos de Reubicación Afgana (CARE) fue establecido como respuesta a la crisis de Afganistán, pero con estas reformas parece que su misión se verá limitada.
Este enfoque ha despertado protestas a nivel local, donde veteranos y organizaciones humanitarias abogan por la continuidad de programas que faciliten la integración y protección de los refugiados afganos en Estados Unidos. En el contexto actual, dejar de lado estas iniciativas podría considerarse una violación de los compromisos adquiridos históricamente por el país en materia de derechos humanos.
Los cambios en el Departamento de Estado se suman a las tensiones políticas en torno a la administración Trump, marcada por una creciente resistencia a iniciativas orientadas a la promoción de los derechos y la inclusión. Esto plantea serios interrogantes sobre el futuro de la política exterior estadounidense y su impacto en las relaciones internacionales.
Las medidas propuestas continúan siendo debatidas en el Congreso, donde se prevé una evaluación rigurosa de sus implicaciones para las políticas y programas existentes en el país, así como su alineación con los valores estadounidenses.
[Fuente: AP]




