"Madres del dolor" de Río Cuarto reclaman por la emergencia en salud mental
Una de ellas contó a Cadena 3 su calvario. Afirmó que el Estado "mira para otro lado". Dijo que "nadie hace nada porque tienen miedo" y aseguró que están decididas "a dar pelea".
02/07/2025 | 10:08Redacción Cadena 3
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Audio. Adicciones: Madres del dolor de Río Cuarto reclaman por la emergencia en salud mental
Siempre Juntos
-A usted le ha tocado enfrentar la situación personalmente, ¿no?
Sí. Hace muchos años que estoy en esta lucha. Y desde 2024 aparecieron otras mamás con la misma problemática que la mía, y estamos decididas a salir a dar pelea a esto.
- No sé a qué edad su hijo comenzó a tener problemas, pero cuando un chico joven comienza, ¿qué se hace, cómo hace la familia?
Te voy a hablar en general, porque somos un grupo de madres autoconvocadas en esto. Acá en Río Cuarto no tenemos dónde dirigirnos. No hay un lugar ni en el hospital, ni en lo que es la municipalidad, no tenemos nada. Estamos solas y buscamos ayuda por fuera. En este caso soy yo la que me encargo de buscar en otros lugares, sea cuál fuese, ya sea una institución, o hasta una psicóloga que trabaje en el tema para podernos orientar a las mamás que están con esta problemática tan terrible.
- ¿Alguna vez intentó internar a su hijo?
Mi hijo ha estado internado en muy buenos lugares en Argentina, pero el flagelo de la adicción a las drogas en Río Cuarto es cruel. Acá nadie pone un parate a nada. entonces ¿de qué vale que nosotras internemos a nuestros hijos si haces media cuadra y venden? Es como una epidemia. Y así estamos viviendo acá, lo que pasa es que antes se veía mucho la marihuana y la cocaína y ahora tenemos paco y tussi en la ciudad. Así que imagínate lo que estamos viendo, vos salís a la noche y vemos zombis por todos lados. Estamos dentro de una película. Esa es la realidad.
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- Vamos a hacer referencia al paco. Y por dónde empezar, porque, insistimos, esto interpela a la cantidad de puntos de venta que todo el mundo conoce, pero nadie cierra. Interpela a las instituciones como la SENAF, que tienen que hacerse cargo de los menores que hoy están a la deriva y están consumiendo drogas y muchas veces robando. Y al mismo tiempo al Ministerio de Salud, que no tienen hoy, nos dice usted, un lugar para atender a los chicos.
Al estar en elecciones, la semana pasada me llamó el secretario de Salud municipal, cuando nunca nos había querido atender y nunca nos dio respuesta, y de Bienestar Social, y tuvimos una charla. A mí me parece que esto ya se ha agravado de tal manera que la SENAF, ¿qué va a hacer? Si son criaturas de ocho o nueve años.
- Voy a hacerle la peor pregunta que se le pueda hacer a una mamá que está planteando lo que usted está planteando. Muchos de los que están escuchando piensan que la culpa es suya. Muchos piensan que la culpa es de padres que no se ocuparon a tiempo de sus hijos.
No, no, acá es un mapa muy amplio. Habrá casos que sí, pero no es el mío ni el de otras mamás. Acá la culpa es del sistema. Yo soy una mujer grande, con hijos mayores, con nietos, esto no es mi culpa, yo nunca le dije a mi hijo: "anda a drogarte" o le permití, o en fin, muchas cosas que conlleva esto. Esto es el sistema. El político, si lo quiere hacer, lo hace, combate. Pero esto mueve mucho dinero, esto es un poder, esto es una pandemia, esto no lo vamos a acabar nunca.
Yo una vez le dije a un juez: "Voy a matar a mi hijo", le dije así, porque te lo juro, le dije: "Voy a matar a mi hijo, me van a dar cadena perpetua", y la gente del poder que vende droga, que mata a nuestros hijos y nos mata a nosotros como familia, nadie dice ni hace nada, todo el mundo tiene miedo y se calla la boca, esto es terrible. Y lo que me duele es ver chicos muriendo, familias destruidas, y que te manden a callarte la boca, porque acá nosotras no podemos hablar porque acá está el poder.
- María, vos llegas a decirle a un juez que podés llegar a matar a tu hijo por la situación en la que vos te ves de indefensión y de que nadie te escuche y te brinde una respuesta, ¿Qué pasa cuando vas, no hay hospital, no hay municipalidad, no hay policía que te ayude, entonces qué pasa cuando tu hijo tiene una crisis y vos vas, pedís ayuda y nadie te la da?, ¿Cómo hacés? ¿Cómo hace una madre en esa situación?
Acá en esta situación ahora que nos hemos agrupado, las madres me llaman por teléfono a la madrugada, yo soy la que salgo a auxiliar.
- ¿Pero vos vas a ponerle el cuerpo a un adicto, digamos, a una situación de crisis con un adicto en crisis, entre ustedes, que armaron como una especie de comunidad y de red y se llaman y se asisten solas?
Nosotras tenemos un grupo de WhatsApp, de Facebook, y de Instagram y ahí estamos todas. Acá una mamá está en peligro con su hijo porque hay chicos que golpean a su mamá, el otro que está en la calle desnudo golpeándose, lastimándose, acá llaman a la policía y no van, no activan el protocolo, llamás a salud mental, no te atienden el teléfono, llamás a la municipalidad, no existe, llamás a Ojos en Alerta, no existe. Entonces salgo yo, muchas veces sola. Por ahí me ha acompañado otra mamá, a calmar las situaciones y hacer que ese chico baje los decibeles, que su mamá se tranquilice y bueno, ahí estoy hasta las cinco de la mañana, me vengo a casa, donde tengo un niño adolescente con autismo que va al colegio y me encargo de mi hijo, y así es lo que estamos haciendo.
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- El pedido que ustedes vienen impulsando sobre una emergencia de salud mental para lograr modificar la internación compulsiva, porque un chico adicto, que está en riesgo, que pone en riesgo a su mamá, que pone en riesgo a su vecino, hay que internarlo, pero no es fácil. ¿No hay manera de internar a alguien que se niega?
Esto es una lucha muy cruel porque el adicto de por sí no quiere internarse, es como el alcohólico, y la familia está; por ahí nosotros hemos decidido sacar a nuestros hijos de nuestras casas, hacerles restricción, entonces están en situación de calle, al estar en situación de calle no tienen dónde dormir, dónde comer, dónde bañarse y hay muchos que acceden a la internación así, poniendo ese límite, y hay otros que no, por eso nosotras el año pasado hicimos una sentada acá en Tribunales pidiendo la reforma de la ley, porque queremos que esa ley se cambie, aparte se tiene que despegar la adicción de salud mental, la salud mental es una cosa y la adicción es otra, pero como esto es un negocio, ahora lo pusieron todo junto.
- En Río Cuarto, ¿qué pasó en estos años, hay cada vez más ventas, es cada vez más fácil conseguir drogas o la policía está haciendo un trabajo cada vez más fuerte en ese sentido?
Yo no sé si están haciendo cada vez más o menos, pero esto cada vez empeora más. Tenemos mucha de esa gente que vive acá en la ciudad, y ¿cómo la sacás?
- ¿Se refiere a los que venden droga?
Exactamente, sí, y son muy pesados. Vienen de otro lado, tienen residencia en Río Cuarto y, como te vuelvo a decir, el poder es el que manda; el poder y el dinero.
- Hay que tomar conciencia del tema, donde hay chicos que desde muy chiquitos caen en las garras de la adicción. Esto genera inseguridad y el Estado no puede, no hay manera de que mire para otro lado.
Pero mira para otro lado, el Estado mira para otro lado.
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