Divertidas barritas de arroz inflado para Halloween inspiradas en Frankenstein

En la celebración de Halloween, siempre surge la búsqueda de aperitivos y snacks que sean atractivos para los más pequeños y que, además, resulten entretenidos de preparar. Este año, una opción divertida son las barritas de arroz inflado, que aunque no son las más rápidas de hacer, ofrecen una experiencia única para cocinar con los niños, especialmente si disfrutan decorando sus propias creaciones. La receta de este año se inspira en el famoso monstruo de Frankenstein.

Estas barritas se sumergen en chocolate blanco teñido de verde y se decoran con ojos de azúcar y fideos de chocolate, imitando el cabello del icónico personaje. El color verde se logra utilizando té matcha, que aporta un matiz natural y un ligero sabor herbal al chocolate blanco. Sin embargo, para quienes prefieran un color más intenso o no dispongan de matcha, se puede optar por chocolate ya teñido o colorantes específicos de repostería en tonos típicos de Halloween, como el verde, naranja o morado. Los ojos de azúcar son completamente comestibles y se pueden encontrar fácilmente en tiendas de repostería.

Ingredientes para 12 unidades:

125 g de arroz inflado

150 g de crema de cacahuete

200 g de miel

Una pizca de sal

170 g de chocolate blanco

Una cucharadita de té matcha

Ojos de azúcar al gusto

Fideos de chocolate al gusto

Cómo hacer Mini Frankensteins de arroz inflado

Dificultad: Fácil

Tiempo total: 2 h 30 m

Elaboración: 2 h 30 m

El primer paso consiste en preparar la base. En un cazo, se debe calentar la crema de cacahuete junto con la miel, la vainilla y una pizca de sal, a fuego muy bajo y removiendo constantemente hasta que la mezcla se vuelva homogénea y fluida. Es crucial que no quede espesa, ya que debe impregnar bien el arroz inflado. Si la mezcla resulta demasiado densa, se puede añadir un poco más de miel.

En un bol grande, se vierte el arroz inflado y, poco a poco, se añade la mezcla caliente. Se debe remover con una espátula para distribuirla de manera uniforme, asegurándose de que todos los granos queden bien cubiertos. Una vez lista la mezcla, se pasa a un molde rectangular forrado con papel vegetal y se presiona firmemente para compactarla y darle forma. Luego, se debe refrigerar durante al menos una o dos horas, hasta que esté firme y lista para cortar.

Mientras tanto, se prepara el baño de chocolate. Se derrite el chocolate blanco al baño maría o en el microondas en intervalos cortos, removiendo entre cada tanda para evitar que se queme. Cuando esté completamente fundido, se incorpora el matcha y se mezcla bien hasta obtener un tono verde uniforme.

Una vez que las barritas estén frías, se cortan y se sumerge un extremo en el chocolate verde. Antes de que se endurezca, se espolvorean los fideos de chocolate para simular el cabello de Frankenstein y se colocan los ojos de azúcar. Si es necesario, se puede utilizar un poco de chocolate derretido para que se adhieran mejor. También es posible dibujar bocas, cejas o cicatrices con lápices pasteleros.

Cuando el chocolate se enfríe y endurezca por completo, las barritas estarán listas para servir o guardar en la nevera.

Estas barritas de arroz inflado combinan perfectamente con bebidas que equilibran su dulzor. Para los niños, se pueden acompañar con un vaso de leche, un batido casero de plátano o incluso una limonada. Para los adultos, son ideales con un café bombón, un té verde o un pumpkin spice latte.

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