Se viene el 1° de Mayo: los secretos de un buen locro
El guiso multicolores de granos y carnes es el plato ideal para compartir en familia. Ideal para el frío, su historia se remonta a épocas precolombinas y ha evolucionado con el tiempo.
24/04/2025 | 14:16Redacción Cadena 3
En Argentina, el locro emergió como un símbolo de reunión y tradición familiar. Este guiso, cargado de historia, tiene raíces que se hunden en las costumbres de los pueblos originarios. En tiempos ancestrales, los pueblos autóctonos preparaban mezclas de maíz y legumbres, que se han ido enriqueciendo con el paso del tiempo.
A menudo, el locro se asocia a las festividades patrias, especialmente al 9 de julio, donde se festeja la independencia argentina. Sin embargo, su popularidad se mantiene durante todo el año, especialmente en los meses más fríos, donde su sabor reconfortante y calidez lo convierten en un plato ideal para compartir con seres queridos.
La base del locro está compuesta por ingredientes humildes, pero nutritivos. Entre sus componentes más destacados se encuentran el maíz blanco, que es el protagonista indiscutido, así como porotos y carne de cerdo, en la que se incluye costilla y chorizo, aportando un sabor ahumado y profundo al guiso. Adicionalmente, se incorporan verduras como zapallo, cebolla y, en algunas ocasiones, hierbas frescas para darle un toque distintivo.
Para preparar un buen locro, se comienza por remojar el maíz y los porotos la noche anterior, lo cual asegura una cocción adecuada y una mejor digestión. Al día siguiente, se hierven ambos ingredientes junto a las carnes en una olla grande, donde se irán incorporando las verduras a medida que el guiso tome cuerpo. Este proceso puede durar entre dos a tres horas, permitiendo que los sabores se fusionen a la perfección.
El resultado es un plato espeso y colorido, que evoca la calidez del hogar y la unión familiar. Además, el locro se sirve tradicionalmente acompañado de una buena salsa de chimichurri, que realza aún más su sabor y quién puede resistirse a la tentación de un buen trozo de pan para acompañar cada cucharada.
Actualmente, los aficionados a la gastronomía siguen reinventando y adaptando esta receta mediante diferentes variantes, agregando ingredientes como zapallo italiano o combinando distintas carnes. Sin embargo, la esencia del locro se mantiene intacta: ser un plato de amor y comunidad ideal para los días de frío, perfecto para las reuniones en familia, donde cada bocado cuenta una historia.
Por todo esto, el locro no solo es un plato, es un abrazo en forma de comida, cargado de emociones y memorias, ideal para disfrutar y celebrar cada momento en sintonía con la cultura argentina.