Pocas propuestas y poca inversión
Por Fernando Genesir.
18/11/2021 | 08:53Redacción Cadena 3

Hoy nos enteramos que el proyecto de presupuesto 2022 que ya está en el Congreso, prevé una reducción del 6,2 por ciento en la inversión que hace la nación en educación. Menos fondos para educación.Esto surge y nos enteramos gracias a un informe elaborado por el Observatorio Argentino por la Educación a partir de datos oficiales .
El informe se titula ¿ cuál es el lugar de la educación? Y este recorte, 6,2 por ciento menos de inversión equivale a 34 mil millones de pesos menos el año que viene en relación con este 2021 . Dicen que la baja se explica, entre otras cuestiones, por una caída real en el presupuesto asignado al desarrollo de la educación superior, es decir, reducción en la inversión en el presupuesto para las universidades nacionales, una reducción que ya había generado críticas por parte de distintos sectores universitarios.
En cambio, parece que las prioridades en materia educativa para el año que viene van a ser los programas de inclusión tecnológica, las becas y la construcción de jardines de infantes. El ministro de Educación, Jaime Perczyk consultado por el diario Clarín dice que este ajuste que está en el presupuesto es un error, un error que se va a corregir. Dice más. Afirma incluso que la inversión no va a ser menor, sino mayor el año que viene, que en este 2021.
Por ahora está la baja del 6,2 por ciento. A mí me llama la atención que nadie se haya dado cuenta y que nos estamos enterando por los diarios gracias a un informe del Observatorio Argentino por la Educación.La nota de Ricardo Grimes, que cuenta además que la inversión qué hace la nación en educación es una parte del gasto educativo porque en realidad 3 de cada 4 pesos que se invierten en el sistema lo hacen las provincias, que son las que sostienen las secuelas, dice el especialista Juan Llach que si la educación interesara de verdad el gasto nacional, tendría que haber aumentado para fortalecer la conectividad, por ejemplo Además se supone que la educación debería ser el motor del crecimiento en los próximos años y que es un presupuesto cuidado o aumentado año tras año. Pero no, no ocurre eso. Y la verdad que tampoco deberíamos sorprendernos tanto. Hace poco veía una encuesta de economía que contaba que sólo 3 de cada 10 argentinos leyó o escuchó alguna propuesta educativa por parte de los candidatos a las elecciones del domingo pasado. En realidad no hicieron muchas propuestas en materia educativa, casi ninguna. Cuando todos, representantes y representados, deberíamos darnos un debate permanente sobre la educación actual y sobre la que esperamos o queremos en el mediano y largo plazo. Discusiones que deberíamos darnos para establecer políticas públicas que se mantengan en el tiempo, gobierne quien gobierne. Consensos básicos para acordar cuánto del presupuesto le asignamos a la educación, que es una forma de decidir cuánto nos importa la educación. Por el momento, pocas propuestas y poca inversión.