¿Por qué los gatos evitan el agua?
Los felinos domésticos detestan el agua. Surgen varias hipótesis sobre este comportamiento, que involucra su evolución y preferencias naturales.
21/06/2025 | 07:02Redacción Cadena 3
La aversión de los gatos al agua es un tema que despierta gran curiosidad entre sus dueños y amantes de las mascotas. Aunque existen excepciones, muchos gatos huyen del agua, ya sea en forma de lluvia o cuando se los intenta bañar. Para entender este comportamiento, es importante explorar las raíces evolutivas y las características de estas criaturas fascinantes.
En primer lugar, es esencial considerar la evolución de los gatos. La mayoría de las especies felinas, incluyendo al gato doméstico, descienden de los felinos que habitaban zonas áridas. Estos animales evolucionaron en entornos donde el agua escasa no era parte de su hábitat cotidiano, como desiertos y sabanas. Como resultado, sus instintos naturales no están adaptados para disfrutar o convivir con el agua, a diferencia de otras especies que han desarrollado afinidades por el medio acuático, como los perros o ciertos felinos africanos.
Por otro lado, el pelaje de los gatos también juega un papel crucial en su relación con el agua. A diferencia de los perros, que tienen un pelaje que se seca rápidamente, el pelo de los gatos está diseñado para mantener el calor. Esto significa que al mojarse, los gatos no solo experimentan frío, sino que también pueden perder su temperatura corporal rápidamente. Por ello, la incomodidad que sienten al estar húmedos es un factor que contribuye a su aversión.
Además, es importante mencionar que el agua, en algunas situaciones, puede volverse una fuente de estrés para los gatos. Los cambios en su entorno, como ser sumergidos en agua, pueden generar ansiedad y temor, afectando su bienestar emocional. Por eso, muchos gatos prefieren evitar la experiencia de mojarse siempre que sea posible.
A pesar de que algunos gatos pueden tener una tolerancia mayor al agua, como las razas turco angora o maine coon, que a veces disfrutan jugar con el agua de manera ocasional, la mayoría de los felinos se siente más cómodos en tierra seca.
Para los dueños que necesitan bañar a sus gatos, es recomendable seguir ciertos pasos que pueden facilitar esta tarea. Aquí algunos consejos:
- Preparar el ambiente: Elegir un lugar tranquilo y familiar para el gato es clave. Las duchas o lavatorios con poco ruido suelen funcionar mejor.
- Usar la temperatura adecuada: El agua debe estar tibia, ni caliente ni fría. Esto ayuda a que el gato se sienta más cómodo y relajado.
- Secar correctamente: Después del baño, es importante secar al gato con una toalla para evitar que sienta frío y se altere.
- Usar productos específicos: Utilizar champús diseñados para gatos previene irritaciones en su piel.
- Reforzar conductas positivas: Ofrecer premios o caricias después del baño puede generar experiencias positivas relacionadas con el agua.