Antinomias que no fueron tales en la historia argentina
20/10/2025 | 10:22Redacción Cadena 3 Rosario
Argentina es un país plagado de antinomias, pero esta afirmación es una verdad a medias. Por definición, una antinomia es una contradicción entre dos principios racionales. Para que exista una antinomia, deben haber dos opuestos, y muchas veces, esos opuestos no son tales.
En el pasado, muchos creían ver opuestos entre Tecnópolis y La Rural. Me pregunto, ¿por qué el mundo de la ciencia y la producción agropecuaria deberían estar enfrentados? ¿No se conocen los avances genéticos aplicados a la reproducción del ganado? ¿No implica un desarrollo intelectual el conocimiento aplicado a la siembra directa, tan pionera aquí en Argentina? Estados Unidos, el país más desarrollado del mundo, es líder en ambos sectores. Era una falsa dicotomía. Se necesitan ambos espacios.
En política, para que exista una antinomia, no es tan importante que los enunciados sean opuestos. Lo que realmente pesa es que uno personifique el bien y el otro el mal. Lo importante parece ser quién es Caín y quién es Abel. ¿En qué momento de la historia nos empezamos a dividir entre buenos y malos? Algunos citan la eterna disputa entre unitarios y federales, en los comienzos de la República. Otros mencionan a Sarmiento y su famosa civilización o barbarie. La antinomia entre unitarios y federales desangró al país durante décadas, y no era una mirada romántica. Se trataba de acordar cómo se iban a distribuir los recursos de un país con un Estado en construcción.
No fue extraño que Urquiza, antiguo aliado de Rosas, lo venza cuando Entre Ríos comenzaba a crecer como economía y quería dejar de depender de la representación de Buenos Aires, que encarnaba Rosas. Urquiza vence a Rosas en Caseros, repite su triunfo en Cepeda y, de un modo inexplicable, se retira en Pavón, cediéndole todo el poder a Bartolomé Mitre. Entonces, ¿era una verdadera antinomia? ¿Los unitarios eran realmente salvajes? ¿Por qué Urquiza pasó de un lado al otro? ¿Son salvajes los franceses, los chilenos, los suecos, los colombianos, los uruguayos que viven en países con administración unitaria? Y la pregunta argentina, ¿realmente es un país federal?
Tal vez no todo es negro o blanco. Los radicales hicieron una revolución en 1890 y recién en 1916 llegaron al poder de la mano de Hipólito Yrigoyen. Era el partido del cambio. Sin embargo, el radicalismo, que encarnaba a los sectores populares y a los inmigrantes en su génesis, cambia con Marcelo Torcuato de Alvear, que soñaba con un radicalismo de guantes blancos. Entonces, ¿cuál era el verdadero radicalismo? El peronismo de 1945 emergió dándole voz a los sectores marginados. ¿Cómo se pasó de esa fuerza que reclamaba justicia social, independencia económica y soberanía política a un menemismo de relaciones carnales con Estados Unidos que generó pobreza y exclusión?
¿No será que se busca un enemigo fácil para no enfrentar las propias contradicciones? ¿No será que el bien y el mal conviven dentro de todo partido o dirigente? Hace un tiempo, Milei dice que es La Libertad Avanza o el kirchnerismo. Patricia Bullrich en su campaña decía que era todo o nada. Ahora Cristina, emulando a Perón, dice que es Milei o la Argentina. No se necesitan falsas antinomias. No es necesario fragmentar más a un país complejo y multicultural.
Quizás sea difícil, pero no imposible. Estados Unidos superó la guerra de secesión, venció las luchas raciales y logró que Barack Obama llegara a la presidencia. Alemania logró unificarse y convertirse en una potencia mundial. Más cerquita, Brasil pudo integrar la industria con el campo y se convirtió en una potencia global. No se necesitan falsas contradicciones. No es necesario crear enemigos para ocultar la debilidad propia. Se trata de crear consensos y de pensar que el que tiene otra mirada propone matices y no es un enemigo. La próxima etapa de Argentina será una etapa de consenso o no será nada.
Lectura rápida
¿Qué afirma el artículo sobre las antinomias en Argentina? El artículo sostiene que las antinomias son contradicciones que a menudo no son reales, ya que los opuestos no siempre son tales.
¿Quiénes son mencionados como figuras clave en la política argentina? Se mencionan a Urquiza, Rosas, Hipólito Yrigoyen, Marcelo Torcuato de Alvear, Perón, Milei, Patricia Bullrich y Cristina.
¿Cuándo se menciona la revolución radical? Se menciona que los radicales hicieron una revolución en 1890 y llegaron al poder en 1916.
¿Dónde se sitúa la discusión sobre la antinomia entre unitarios y federales? La discusión se sitúa en el contexto de la República argentina, mencionando conflictos históricos y la distribución de recursos.
¿Por qué se critica la creación de enemigos en la política? Se critica porque se busca un enemigo fácil para evitar enfrentar contradicciones y fragmentar aún más a un país complejo y multicultural.





