ZMoney, el escándalo de la criptomoneda que salpica a Trump
El presidente de EE.UU. enfrenta acusaciones de manipulación financiera y conflictos de interés por su vinculación con World Liberty Financial y la criptomoneda $TRUMP, conocida como ZMoney, en un caso que pone en jaque la transparencia de su administración
29/04/2025 | 13:06Redacción Cadena 3
El 17 de enero de 2025, días antes de su segunda toma de posesión, el presidente Donald Trump anunció desde su mansión en Mar-a-Lago el lanzamiento de World Liberty Financial, una empresa cripto liderada por él y sus hijos Eric, Donald Jr. y Barron.
La iniciativa, presentada como una “revolución financiera”, incluía la criptomoneda $TRUMP, también conocida como ZMoney, un memecoin especulativo sin utilidad práctica más allá de la especulación.
En un livestream junto a los empresarios Zachary Folkman y Chase Herro, Trump afirmó: “Crypto es algo que debemos hacer, queramos o no”.
El lanzamiento fue precedido por un tuit de Trump el 14 de enero, donde promocionaba $TRUMP, desencadenando una fiebre especulativa que disparó su valor.
Sin embargo, tras alcanzar un pico, la criptomoneda colapsó y dejó a miles de inversores, muchos de ellos seguidores de Trump, con pérdidas significativas. Este colapso desató acusaciones de pump and dump (inflar y abandonar) y abrió un debate sobre la legalidad de las acciones de Trump.
El escándalo ZMoney ha generado múltiples señalamientos contra Trump y su entorno.
La oposición, liderada por los demócratas Adam Schiff y Ruben Gallego, solicitó una investigación al Congreso por posible uso de información privilegiada (insider trading).
Alegan que Trump y sus aliados, incluidos multimillonarios cercanos, se beneficiaron, precisamente, de información privilegiada al suspender abruptamente aranceles globales el 9 de abril de 2025, lo que disparó los mercados.
Según Bloomberg, ese día los multimillonarios ganaron 304 mil millones de dólares, y Trump se jactó en el Despacho Oval de las ganancias de sus “amigos ricos”.
Una investigación de The New York Times reveló que Zachary Folkman, alias “ZMoney”, ofreció “asociaciones” a startups cripto a cambio de pagos multimillonarios a World Liberty Financial.
En un mensaje por Signal, Folkman sugirió que estas transacciones otorgarían “exposición y credibilidad” gracias a la marca Trump, lo que críticos califican como un esquema de soborno encubierto.
Expertos legales consultados por PolitiFact advierten que $TRUMP permite transacciones anónimas, facilitando potencialmente contribuciones ilegales más allá de los límites de campaña.
El senador Chris Murphy acusó a Trump de operar un “esquema de soborno encubierto” donde CEOs y oligarcas extranjeros podrían enviar dinero a través de ZMoney a cambio de favores.
La Casa Blanca asegura que los activos de Trump están en un fideicomiso gestionado por sus hijos, con lo cual considera que no hay conflictos de interés.
Sin embargo, The Washington Post reportó que, a diferencia de 2017, Trump no ha vendido sus acciones, y mantiene una participación multimillonaria en Truth Social y World Liberty, lo que plantea dudas sobre su imparcialidad.
Los protagonistas
Folkman y Herro
Zachary Folkman y Chase Herro, socios de Trump en World Liberty, son figuras controvertidas.
Folkman, quien dirigía una empresa llamada Date Hotter Girls, y Herro, con un historial de cargos por posesión de marihuana, vendieron desde suplementos hasta consejos para hacerse rico.
Su entrada al criptomundo fue impulsada por Steve Witkoff, un amigo de Trump, y Donald Jr. los elogió como “mentes financieras de primera clase”.
Sin embargo, su historial de proyectos fallidos ha generado escepticismo sobre su credibilidad.
El éxito inicial de $TRUMP, impulsado por compras como los 75 millones de dólares del criptoempresario Justin Sun, generó cerca de 390 millones de dólares para Trump, aproximadamente 245 millones tras impuestos.
Además, las tarifas de trading de $TRUMP sumaron unos 350 millones para entidades ligadas al presidente.
Este flujo de efectivo, combinado con el alza de Truth Social, duplicó la fortuna de Trump de 2.3 a 5.1 mil millones de dólares en un año, según Forbes.
Políticamente, el escándalo amenaza con erosionar la confianza en la administración Trump.
Las acusaciones de insider trading y soborno han galvanizado a los demócratas, mientras que los republicanos defienden que las críticas son un cherry picking injusto y que las políticas de Trump beneficiarán a todos a largo plazo.
Sin embargo, aliados como el multimillonario Ken Griffin han criticado las tácticas de Trump, advirtiendo que su guerra comercial daña la marca global de Estados Unidos.
Obviamente, Trump negó cualquier irregularidad y calificó las acusaciones como una “cacería de brujas” orquestada por la oposición.
En Truth Social, afirmó que $TRUMP es un “juego divertido” para inversores y no una estafa, mientras que su equipo legal insiste en que no hay evidencia de dolo.
La Casa Blanca, a través de la portavoz Anna Kelly, reitera que no existen conflictos de interés.
El caso ZMoney plantea preguntas cruciales sobre la regulación de criptomonedas y la ética presidencial.
Mientras la Justicia y el Congreso evalúan posibles investigaciones, el escándalo podría influir en la percepción pública de Trump en un año electoral clave.
La falta de transparencia en las operaciones de World Liberty y la naturaleza anónima de $TRUMP alimentan las sospechas, dejando al presidente en el centro de una tormenta financiera y política.