En vivo

Recorriendo el país

Ana Castro

Argentina

En vivo

Recorriendo el país

Ana Castro

Rosario

En vivo

La música de la Heat

Música

En vivo

Musical

Música

En vivo

Random domingos

Radio

Podcast

La última muerte de Nora

Podcast

La mesa de café

Podcast

La otra mirada

Podcast

El dato confiable

Podcast

3x1=4

Podcast

La quinta pata del gato

Podcast

Cuadro de Situación

Podcast

80 años del Cuarteto

Podcast

Nazareno Cruz y el Lobo

Podcast

La Chacarera, el latido del monte

Podcast

Francisco: los 10 años del Papa argentino

Escuchá lo último

Elegí tu emisora

De Santa Cruz a Tierra del Fuego: el país más loco del mundo

A los fueguinos los vamos a seguir subsidiando para que "sustituyan" importaciones. Y a los santacruceños los vamos a subsidiar para que importen a rolete. ¿Quién subsidia a Islandia?

18/10/2021 | 13:00Redacción Cadena 3

  1. Audio. De Santa Cruz a Tierra del Fuego: el país más loco del mundo

    Siempre Juntos

    Episodios

No caben dudas. Somos el país más loco del mundo. Hoy, en el mismo día, a los fueguinos los vamos a volver a subsidiar para que sustituyan importaciones; y a los santacruceños, ahí nomás, pegaditos, los vamos a subsidiar para que realicen más importaciones.

A los fueguinos el gobierno nacional les va a renovar ¡otra vez!, y al menos por 15 años, el régimen de promoción industrial para la industria electrónica. Hace 50 años que existe ese régimen. Y nunca funcionó. Si no, ya no serían necesarios los subsidios.

Básicamente el régimen sirve para que una decena de fabricantes de televisores, celulares y aires acondicionados puedan importar sin aranceles y con dólar subsidiado todas las piezas y puedan vendernos todo eso a nosotros a precios más caros que los importados, encima con beneficios en IVA y Ganancias. El Congreso calcula que este año el Estado va a dejar de recaudar 77 mil millones de pesos en impuestos que sí se pagarían si todo eso se importara. Esa plata equivale a pagarles 374 mil pesos por mes (más aguinaldo) a cada uno de los 15.800 empleados directos e indirectos que esas fábricas dicen que tienen.

A los santacruceños, en cambio, el gobierno nacional les va a permitir desde hoy abrir una zona franca minorista donde, además de poder comprar desde neumáticos hasta perfumes importados sin aranceles y con ventajas impositivas, van a poder comprar hasta 600 dólares al mes por santacruceño, acumulables por familia. Los menores tendrán un cupo de 300. Una familia de dos adultos y dos chicos podrá importar por 1.800 dólares al mes. O sea, por el equivalente al ingreso total de muchos hogares.

O sea, el resto de los argentinos seguimos con el cepo de 200 dólares, siempre que no reciban o hayan recibido algún subsidio. Los santacruceños tendrán coronita.

En Santa Cruz la cosa también se pondrá locamente burocrática. Por ejemplo: se supone que en la zona franca habrá dos concesionarias de autos importados. Entonces, hay que evitar que cada hogar santacruceño se transforme en un concesionario dedicado a revender coches en el resto del país hay que empezar con los controles. El más kafkiano: los autos que se compren en la zona franca sólo podrán circular 90 días fuera de Santa Cruz ¿No es hermoso?

A todo esto, nadie se hace una pregunta: ¿por qué Tierra del Fuego y Santa Cruz necesitan subsidios eternamente, que se suman a las infinitas subvenciones fiscales y de todo tipo que ya tienen? ¿Por que hace frío? ¿Quién subsidia a Islandia? ¿Y a Noruega?

Las dos provincias tienen petróleo, gas, minería, turismo, ganado lanar, pesca. Cualquier país podría ser multimillonario con eso. En cambio no han desarrollado jamás nada de eso. Porque se dedicaron a vivir del empleo público y la coparticipación, además de prebendas como las que se van a disponer hoy.

El desastre de 50 años de desmadre demográfico y fiscal se traduce en una postal: pese a las fortunas gastadas Río Grande -donde se supone que hace 50 años le metemos guita a un polo industrial- no tiene puerto.

Es otro capítulo más del país sin ton ni son: un laboratorio de políticas económicas manejado por delirantes.

Que en el mismo día hace una cosa (subsidiar la sustitución de importaciones) y exactamente la contraria (subsidiar el consumo de importados).

En el medio estamos nosotros, los que seguiremos pagando celulares carísimos y pondremos los dólares para que los santacruceños compren los suyos baratísimos.

Lo más visto

Política y Economía

Opinión

Podcast

La otra mirada

Podcast

La mesa de café

Podcast

La quinta pata del gato

Podcast

3x1=4

Podcast

El dato confiable

Podcast

Política esquina Economía

Podcast

Abrapalabra

Podcast

Cuadro de Situación

Podcast

Los editoriales de Alberto Lotuf

Podcast

Agenda económica

Podcast

Las Claves de Zucho