Comer queso antes de dormir podría llevar a tener pesadillas, advierten estudios
Investigaciones revelan que la ingesta de queso antes de dormir puede provocar pesadillas. Tipos de queso y cantidad son factores relevantes en esta relación alimenticia.
22/07/2025 | 13:06Redacción Cadena 3
Un reciente informe ha profundizado en lo que algunos aficionados al queso ya presagiaban: consumir este delicioso lácteo antes de acostarse puede estar asociado con la aparición de pesadillas. Estudios realizados han analizado cómo la digestión del queso influye en la actividad cerebral durante el sueño.
Los resultados indican que factores como el tipo de queso, la cantidad consumida y el momento de su ingesta son determinantes. Por ejemplo, quesos curados y fuertes como el Stilton o el Roquefort tienden a provocar sueños más intensos, e incluso pesadillas. Esto se debe a que estos quesos contienen triptófano, un aminoácido que podría alterar los patrones del sueño.
A su vez, las experiencias individuales pueden influir en cómo reacciona cada persona ante el consumo de queso antes de dormir. Algunas personas han reportado sueños surrealistas tras comer queso, que no se han traducido necesariamente en pesadillas. Esta variabilidad sugiere que el impacto del queso en el descanso puede diferir entre individuos.
Adicionalmente, expertos destacan que la ingesta de alimentos pesados o difíciles de digerir antes de ir a la cama podría afectar la calidad del sueño. Las pesadillas pueden ser, en algunos casos, una respuesta a la incomodidad física producida por la ingesta de ciertos alimentos. Por ello, se aconseja a quienes son propensos a experimentar sueños perturbadores que moderen o eviten el consumo de queso en la noche.
En resumen, aunque el queso es una delicia para muchos, quienes busquen un descanso reparador deberían considerar la cantidad y el momento de su consumo. Aunque se necesita más investigación para establecer una relación concluyente, los hallazgos actuales sugieren que, por lo menos en algunas personas, disfrutar de una porción de queso antes de dormir podría no ser la mejor opción para tener un sueño reparador.




