Ana María Picchio y Lito Cruz, alma y voz de la obra teatral "Todos eran mis hijos"

Lito Cruz y Ana María Picchio son la columna vertebral de la pieza de Arthur Miller, "Todos eran mis hijos" que se presenta en el Teatro Real, hoy, el sábado y domingo prácticamente a sala llena.

Cruz y Picchio además están acompañados por un gran elenco que integran: Federico D''Elía, Esteban Meloni, Vanesa González entre otros actores.

Cruz y Picchio visitaron los estudios de Cadena 3 y hablaron sobre la pieza teatral, el paso de ambos por el cine, la fama que da la TV y la necesidad de impulsar en Córdoba una ley provincial para apoyar el teatro independiente.

"Vengo a hablar con la gente de (la secretaria de) Cultura para crear la ley provincial de teatro independiente de Córdoba, así como hemos creado la ley provincial de teatro de la Provincia de Buenos Aires y eso le da un poder grande al teatro independiente por el tema de los recursos", explicó Cruz.

"Además, crear espacios para hacer teatro, saca a los chicos de la calle y allí, en ese ámbito se empiezan a probar las vocaciones de actor, bailarín, autor, escenógrafo, director", reflexionó el actor.

La actriz contó que vienen de una larga gira que incluyó ciudades como Santa Fe, Rosario, Paraná, Concordia, Rafaela, y varias de la provincia de Buenos Aires.

Además, la actriz recordó que su exitoso paso por la pantalla grande en filmes memorables como "Breve Cielo", "La Tregua", "La Chechechela" .

"Con el personaje de Laura Avellaneda de 'La Tregua', logré meterme en el corazón de todos los viudos", dijo Picchio y señaló que aún hoy la gente le sigue diciendo Avellaneda.

A su turno, Lito Cruz destacó los trabajos de Pablo Echarri, Martín Seefeld y Federico D''Elía en la producción y dirección artística de “El Elegido”, novela que se emite por Telefé de lunes a jueves a las 23.

En “El Elegido”, Cruz interpreta al malvado Oscar Nevares Sosa, vinculado con masones y asociaciones ilícitas para sacar provecho propio en detrimento de los pueblos originarios.

Cruz destacó que la participación de sus colegas en la producción y dirección artística le dan un plus a la ficción.

Antes de despedirse Cruz y Picchio hicieron un breve parlamento de "Todos eran mis hijos", la dosis justa para quedarse con ganas de ver la obra completa .

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