Chiarella: "Derribar búnkers es devolverle la tranquilidad a los barrios"

El intendente de Venado Tuerto, Leonel Chiarella, destacó el derribo del búnker número 100 de venta de drogas en la provincia de Santa Fe como un mensaje “muy claro y contundente” contra el narcotráfico barrial. La intervención se realizó en un inmueble de calle Pavón 568, en el barrio Victoria, en el marco de la Ley de Microtráfico, a dos años de su implementación.

En diálogo con Radioinforme3 por Cadena 3 Rosario, Chiarella recordó que Venado Tuerto fue escenario de la acción de bandas narco que llegaron a tener fuerte notoriedad pública. “Nahuel Novelino, Matías Álvarez, Guacho Maxi son líderes de bandas que operaban en nuestra ciudad y que hoy están presos en cárceles y pabellones de máxima seguridad. Eso es un mensaje muy claro”, sostuvo el intendente, quien remarcó que esas organizaciones fueron denunciadas “con nombre y apellido”.

El jefe municipal subrayó que incluso él mismo declaró en la Justicia en causas vinculadas al narcotráfico. “Cuando denunciamos la venta de droga, nos amenazaron, y aun así seguimos adelante. Decidimos ir a fondo”, afirmó. En ese sentido, consideró que la Ley de Microtráfico impulsada por el gobierno provincial “trajo una herramienta fundamental para combatir la venta en los barrios”.

Sobre el operativo de este lunes, Chiarella detalló que el búnker derribado era utilizado por dos adultos que comandaban una banda integrada por ocho personas. “David Arreche y Alejandra Tiseira utilizaban a menores de edad para vender droga. Los ocho integrantes hoy están presos”, señaló, y valoró el trabajo conjunto entre el Ministerio de Justicia y Seguridad, la Justicia y los fiscales del MPA.

El intendente remarcó el impacto directo que estos puntos de venta generan en la vida cotidiana. “Donde hay un búnker de droga hay delito, hay prostitución, hay menores utilizados y se rompe la tranquilidad de los vecinos”, explicó. Según dijo, el derribo permite que el barrio “recupere la calma que había perdido”.

Chiarella insistió en que la política tiene dos pasos centrales: primero, “los delincuentes presos”, y segundo, “tirar abajo el lugar donde se vendía droga”. “No puede seguir funcionando como aguantadero o kiosco narco. El mensaje es que ahí no se vuelve a vender droga”, remarcó.

Además, destacó que el caso de Venado Tuerto se inscribe en una decisión provincial más amplia. “El búnker 98 fue en Capitán Bermúdez, el 99 en Frontera y el 100 en Venado Tuerto. Hay una decisión clara del gobernador Maximiliano Pullaro de ir a fondo en toda la provincia”, afirmó.

Finalmente, Chiarella defendió la desfederalización del narcomenudeo y cuestionó miradas que, según dijo, “se quedan en lo teórico”. “Cuando el Estado no actúa, los búnkers siguen, la droga avanza y los barrios quedan atrapados. Esta ley y estas decisiones están dando resultados concretos”, concluyó.

Entrevista de Hernán Funes.

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