La industria en la minipimer, pero el consumidor festeja
08/12/2025 | 11:41Redacción Cadena 3
La industria en la minipimer, pero el consumidor festeja. Noticia del día, la baja notoria del precio de los electrodomésticos. En general, línea blanca, electrónica y demás. Bastante impresionante, ¿no? Baja en pesos, en pesos. Hasta el 26% de rebaja, según un relevamiento del diario Clarín.
Les doy algunos ejemplos. Un Smart TV que en enero costaba 300 mil pesos, hoy cuesta 220 mil pesos. O sea, es una baja del 26%. Un celular Motorola que valía 200 mil pesos en enero, ahora está a 170 mil, es un 15% menos. Una heladera Philco, que pasó de 640 mil a 600 mil, menos 6%. Un aire acondicionado split, de 685 mil a 639 mil. Ya son menores las rebajas, pero son en pesos en un momento de gran inflación.
Obviamente se conjugan aquí varios factores. Uno, la rebaja de aranceles que hubo. Rebaja parcial para importar estos productos. La apertura comercial, digamos, la agilización de todo el sistema. Ahora no hay SIRAs, por ejemplo. Las SIRAs eran los permisos que tenían que tramitar un importador en el Banco Central para que le dieran los dólares oficiales para poder importar. Se los niega, hubo sospecha de corrupción y todo eso. En fin, eso se terminó.
Hay acceso libre al mercado único de cambio, así que el que quiere importar, importa. Se eliminó el impuesto país, que era una carga importante. Y ahora el 15 de enero se anticipan nuevas bajas de precios porque se van a eliminar los aranceles que quedaban. Notoria la rebaja. Eso en pesos, pero en dólares la rebaja es aún más grande porque en enero el dólar oficial estaba a 1.057 pesos y ahora está a 1.460. Entonces, este ejemplo del televisor que te daba, en dólares bajó un 47%.
La ventaja para los consumidores es indudable. No cabe ninguna duda de la enorme ventaja que es para todos nosotros como consumidores. El problema está en la industria argentina que se dedica a producir estas cosas. Celulares, bueno, Tierra del Fuego ha arreglado un régimen especial, parece que zafa. Pero después tenés las heladeras, los lavarropas, toda la línea blanca que está sufriendo este esquema.
El caso emblemático es el de Whirlpool. Whirlpool había empezado a producir en 2023. Pero había empezado a producir no porque la Argentina ofrezca condiciones para producir este tipo de cosas, sino porque como no había más dólares, no le daban más dólares para importar. Hace 35 años está en la Argentina importando. Entonces se puso a producir. Igual a los componentes los tenían que importar porque la Argentina no fabrica motores para esas cosas, ni los chips inteligentes que necesitan los lavarropas.
La pregunta es este dilema para nosotros, ¿qué hacemos? ¿Nos quedamos con salarios bajos, productos caros? O de una vez por todas decimos, bueno, la Argentina tiene que dejar de producir ciertas cosas, algunas cosas por lo menos. Las empresas tienen que rebuscárselas a ver cómo se diría, a qué se dedican, los empleos tienen que cambiar.
Porque Canadá, Australia, Nueva Zelanda, Uruguay, Chile, no fabrican lavarropas. Los importan. Y no se muere nadie. Acá, la pregunta es, ¿y de qué vamos a vivir si no hacemos otras cosas? La Argentina tiene muy pocas condiciones que la posicionen para tener una industria agroalimentaria, ganadera potentísima.
La Argentina tiene un sector de salud que puede prestar servicios a buena parte del mundo. Se puede combinar el turismo y la salud. ¿Hay dinero? ¿Traer viejos del mundo desarrollado con buenas pensiones que vengan a vivir acá, a un país con este clima fantástico? Hay muchísimas cosas para hacer.
El tema, tal vez, es que la reconversión a ese sistema va a llevar mucho tiempo y va a ser muy costoso para muchos. Socialmente, hay muchas familias que todavía dependen de ese sistema. Exactamente. Esa transición. ¿Quién paga el costo? Bueno, ahí hay que pensar en un mecanismo solidario que no dé lugar a la corrupción.
Hay ciertas cosas que la Argentina podría decir, no, sí, sí, estas las quiero tener. Porque tengo capacidades acá importantes, industriales. Lo que no va a poder hacer la Argentina es querer fabricar de todo. Esa es una meta indudable para la Argentina.
Si elegimos, ¿qué elegimos? Ustedes escucharon la industria metalúrgica Pescarmona de Mendoza. Esa empresa no quebró ahora, ya quebró antes, fue estatizada, se privatizó, la agarra un grupo estadounidense. Están ahí fabricando grúas para puertos, implementos que se usan en la industria atómica. No se puede proteger todo porque si no, ¿Quién pone la plata para proteger todo?





