Trapitos violentos
07/02/2025 | 09:20Redacción Cadena 3
El domingo a la madrugada, un joven de 20 años fue atacado por un cuidacoches, conocido como "naranjita", tras negarse a darle 10 mil pesos para cuidar su auto. Este incidente ocurrió a la salida de un boliche en Ramos Mejía, partido de La Matanza.
La situación cobra mayor relevancia porque el agredido es Gonzalo Driuzzi, hermano del futbolista, lo que hizo que la noticia se multiplicara. El cuidacoches lo golpeó y le fracturó la mandíbula.
Un día antes, en Flores, un médico también fue amenazado por otro naranjita, quien le exigió 5 mil pesos bajo amenaza de violencia. Como el conductor no tenía el efectivo, el agresor se alejó, tomó un listón de madera y lo golpeó en la cabeza. Estos son solo algunos de los últimos hechos de violencia que se han reportado, sin entrar en detalles de incidentes de años anteriores.
A mediados de enero de este año, un video se volvió viral mostrando a un trapito golpeando a un policía municipal en Mar del Plata. Después de la detención del agresor, se reveló que estaba prófugo de la justicia desde hacía 11 años.
El intendente de General Pueyrredón, Guillermo Montenegro, expresó que no se puede permitir que personas se adueñen de la calle, destacando que no solo se trata de un delito, sino también de una situación de extorsión permanente en el espacio público.
En Córdoba, la situación no es diferente. Los naranjitas copan las calles y cobran lo que quieren. Aunque no todos actúan de esta manera, muchos lo hacen sin control.
Las autoridades piden a los vecinos que denuncien estas situaciones llamando al 911. Sin embargo, además de denunciar, es crucial regular y ordenar esta actividad, algo que parece no lograrse desde hace años.
A pesar de los hechos violentos y las denuncias, el problema persiste y parece incontrolable. Algunos proponen prohibir esta actividad. En la provincia de Buenos Aires, hay un proyecto de ley que busca prohibir a los naranjitas, con severas sanciones, multas y arrestos. Sin embargo, se trata de un proyecto de ley sin fecha de tratamiento.
En la ciudad de Buenos Aires, también se busca endurecer las sanciones a los trapitos. El ministro de Seguridad, Waldo Wolff, menciona la intención de reformar la ley para que esta actividad deje de ser una contravención y se convierta en un delito. A pesar de que algunos agresores están detenidos, no lo están por cobrar el estacionamiento en la vía pública, sino por agredir a personas y resistir a la autoridad policial.
Dejo la pregunta en el aire: ¿realmente estas medidas van a funcionar? ¿Se logrará controlar esta problemática o seguirá creciendo?
