Especialistas advierten sobre consumo de sal y cuidados cardíacos ante el calor

El cardiólogo Nicolás Chichizola analizó los cuidados necesarios frente a las altas temperaturas, con especial atención al consumo de sal, la hidratación y la salud cardiovascular. Sus definiciones se dieron en una entrevista realizada en Una Mañana para Todos por Cadena 3 Rosario, en un fin de semana marcado por humedad elevada y temperaturas extremas.

Chichizola explicó que la sensación de sed aparece cuando ya existe un grado de deshidratación, por lo que aconsejó ingerir agua de manera regular. Indicó que las personas con insuficiencia cardíaca deben tener un control más estricto tanto de la cantidad de líquido como de la sal, debido al impacto que puede producir en su cuadro clínico.

El especialista detalló que la mayor parte del sodio proviene de alimentos procesados, conservas y embutidos. Señaló que cocinar en casa permite regular mejor el uso de sal y recordó que la recomendación diaria ronda los dos gramos, equivalente a una cucharadita de té. En pacientes cardíacos, ese límite puede ser aún menor.

Chichizola subrayó que reducir el sodio no implica una restricción excesiva, sino un cambio de hábito. Aumentar la ingesta de frutas y verduras, agregó, aporta potasio y contribuye al equilibrio cardiovascular. También destacó la necesidad de hidratarse bien y evitar períodos prolongados sin alimentación para prevenir bajones de presión.

Respecto a los episodios de hipotensión, recomendó acostar a la persona, elevar las piernas y ofrecer agua o una pequeña cantidad de sal si está consciente. En caso de pacientes diabéticos, podría requerirse azúcar si se sospecha hipoglucemia.

El cardiólogo advirtió que muchas personas retoman la actividad física durante el verano sin una evaluación previa. Señaló que una consulta médica y estudios básicos, como electrocardiogramas, permiten identificar arritmias, factores de riesgo coronario o posibles complicaciones. Indicó que la mayoría podrá ejercitarse sin restricciones, pero algunos requerirán seguimiento específico.

Finalmente, se refirió a la disponibilidad de desfibriladores automáticos externos (DEA) en espacios públicos. Afirmó que aún no son suficientes y que resultan fundamentales como herramienta de respuesta rápida ante episodios de muerte súbita. Remarcó que los dispositivos están diseñados para ser utilizados por cualquier persona siguiendo sus instrucciones.

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